10 pasos para eliminar el estrés estas vacaciones

En muchas ocasiones las ansiadas vacaciones de verano no son tan relajantes como a uno le gustaría. Los expertos recomiendan aprovechar el tiempo libre para recuperar el bienestar físico y emocional y desprenderse del estrés, aunque a veces el periodo vacacional va asociado a otras situaciones que pueden impedirlo. ¿Cómo evitarlo? Éste es el decálogo para sacar partido a las vacaciones:

1. Que el dinero no sea un problema. Anticipar gastos, hacer una planificación y gestionar el dinero real son algunos de los consejos. Ahorrar un 10% al mes para destinarlo a las vacaciones es una buena manera de mantener el control sobre las finanzas personales.
2. No programar los días. Hacer planes puede causar estrés; a veces es bueno improvisar y hacer lo que apetece en el momento.
3. Las escapadas cortas también son rentables. Cuanto más largas son las vacaciones, más cuesta volver al trabajo y adaptarse a la rutina de nuevo.
4. Dejar a un lado la autoexigencia. No siempre hay que cumplir con todas las expectativas, por lo que es recomendable no intentar aprovechar el tiempo demasiado, hacer más cosas de lo normal.
5. Positividad y mente abierta. Es clave para evitar frustraciones y aprovechar el tiempo al máximo.
6. Aprender a conversar en familia y en pareja. Que los divorcios y separaciones aumentan a la vuelta de las vacaciones es un dato que se repite año tras año. Pasar más tiempo juntos de lo habitual puede hacer aumentar los roces. Imponer planes, horarios o ideas no es recomendable. Los expertos creen preferible debatir y llegar a un consenso.
7. Aceptación. Asumir que no todo será perfecto en vacaciones es una buena manera de no crear expectativas demasiado altas. Para disfrutar el tiempo libre es importante aceptar que no hay la obligación de ser felices en todo momento de las vacaciones.
8. Desconexión. De las redes sociales, no de los sentidos y de uno mismo.
9. Buena alimentación. Los excesos veraniegos pueden llevar, otra vez, a la frustración. No hace falta poner como norma estricta llevar una alimentación sana, pero sí como una rutina que puede romperse.
10. Ejercitar la mente a través del cuerpo. Practicar algo de ejercicio, por poco que sea, siempre es buena idea, y más cuando uno dispone de tiempo libre. Aporta energía y puede facilitar la vuelta al trabajo y a la rutina.