El estudio de videojuegos Riot Games deberá pagar una multa de 88,53 millones de euros (100 millones de dólares) por discriminar de forma continuada a sus trabajadoras. De esta sanción, cerca de 80 millones de euros deberán destinarse a compensar a las más de 2.300 mujeres empleadas ahora o en el pasado en la compañía.
No será la única medida que deberá adoptar la empresa tecnológica. Riot Games también creará 40 plazas específicamente para las mujeres que participaron en la acción judicial. Además, la compañía deberá velar por la transparencia salarial y someterse a un "análisis de género" por parte de un consultor externo.
Sexismo generalizado
La firma creadora del popular League of Legends cerrará así una demanda interpuesta en 2018 por parte de un grupo de trabajadoras. Las demandantes afirmaron haber sido víctimas de acoso sexual, faltas de respeto y discriminación sexista. Las afectadas acusaban a la dirección de pagar más a los hombres que a las mujeres y de impedir el ascenso profesional de las trabajadoras.
Aunque en 2019 se alcanzó un primer acuerdo que rebajó la compensación económica a 10 millones de dólares, las agencias reguladoras de California recurrieron la resolución. Finalmente, esta cantidad se ha multiplicado por diez.
Otros casos en Ubisoft y Blizzard
El acuerdo llega, además, cuando la industria de los videojuegos está en el ojo del huracán por su política de contratación. Activision Blizzard, desarrollador de Call of Duty y World of Warcraft, también ha sido acusada de conducta sexual inapropiada hacia su plantilla.
Por su parte, la francesa Ubisoft, que cuenta en su catálogo con títulos como Assassin's Creed y Far Cry, fue demandada en julio de este año por el sindicato Solidaire Informatique Jeu Vidéo por acoso sexual. Entre los supuestos acosadores se encontraba el exdirector creativo de la firma, Serge Hascoët.