Elon Musk la ha vuelto a liar en Twitter. El primer directivo de Tesla ha provocado un derrumbe de las acciones de la compañía tras abrir una encuesta en Twitter para decidir la venta de 21.000 millones de acciones de la tecnológica. Este paquete accionarial asciende a unos 18.230 millones de euros (21.000 millones de dólares). El órdago de Musk ya ha repercutido sobre el valor bursátil del fabricante, que ha caído hasta un 9% en la preapertura de la bolsa alemana. Un porcentaje similar al de Wall Street, donde la curva de cotización ha decaído un 7%.
El magnate se comprometió a deshacerse del 10% de acciones que controla --Musk tiene el 23% del capital de Tesla-- si sus seguidores apoyaban la decisión. La sorpresa llegó el pasado sábado cuando, tras la participación de más de 3,5 millones de usuarios, el sí se impuso con el 58% de los votos. "Me atendré a los resultados de esta encuesta, sea cual sea el resultado", declaró el ejecutivo. Una afirmación que podría acarrear serias consecuencias económicas y jurídicas para la cotizada.
Tesla cae hasta un 9%
De entrada, el efecto directo de la apuesta de Musk ha sido el desplome de las acciones de Tesla antes de la apertura de los parqués. La encuesta del directivo cae, además, en pleno debate sobre la presión fiscal a los ultrarricos en EEUU, donde el gobierno presidido por Joe Biden quiere sacar adelante un impuesto para los multimillonarios.
No es la primera vez que Musk se mete en problemas en Twitter. El pasado junio, el emprendedor hundió la cotización de bitcoin tras rechazarlo como medio de pago en Tesla. En 2018, Musk selló incluso un acuerdo con los reguladores para tutelar la publicación de mensajes en la plataforma, tras ser acusado por la SEC --la agencia estadounidense que controla las empresas de valores-- de manipular el mercado. No se descarta que el regulador vuelva a sancionar al industrial por esta nueva excentricidad.
¿Estrategia rentable?
Aunque en esta ocasión la jugada podría salirle rentable al empresario. Musk podría obtener liquidez gracias a las opciones sobre la venta de acciones que posee en la compañía. Según algunas estimaciones, la puesta en venta de todos sus intereses en este momento a precios de mercados supondría unos ingresos de casi 100.000 millones de dólares (865.000 millones de euros al cambio).
Actualmente, el fundador de Tesla tiene una fortuna personal de 300.000 millones de dólares (aproximadamente 258.000 millones de euros) gracias a la rápida revalorización bursátil de la marca de vehículos eléctricos. Para hacerse una idea del patrimonio forjado por Musk, esta cifra equivale al 52% de la capitalización conjunta de todas las cotizadas del Ibex 35.