El secretario de Salud Pública de Cataluña, Joan Guix, asegura que "no hay ningún motivo sanitario" para suspender el Mobile World Congress (MWC) de Barcelona, previsto que se celebre entre el 24 y el 27 de febrero.
Considera que existe una “epidemia mediática y de miedo". "Hay muchos otros factores que pueden intervenir en esto [por la cancelación], de tipo económico, competencial e, incluso, de tipo político", matiza para tratar de alejar el foco del ámbito sanitario.
Culpables
Guix subraya, en una entrevista en RAC1, que no hay "ninguna causa objetiva que se pueda demostrar científicamente" para que las empresas se hayan dado de baja del MWC. Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya anunció hace una semana que existe la alerta sanitaria global.
La reunión que celebrará el próximo viernes la organizadora del Mobile, GSMA, para determinar si el evento se celebra o no, ha activado todas las alarmas de una posible cancelación. Mientras desde la Administración niegan que deba producirse, "no hay ningún motivo sanitario en el momento actual en Barcelona para suspender el MWC”, insiste Guix.
Miedo “relativo”
Desde la Administración parecen echar la culpa a los medios de comunicación cuando la cifra de muertos asciende a más de 1.000 personas y hay más de 43.000 afectados. “Las imágenes tenebrosas con gente disfrazada y de ciudades desiertas como si estuvieran aquí al lado de casa no ayudan nada".
Guix trata de relativizar la crisis global. "El coronavirus no es el único problema que tenemos en el mundo. Hay una epidemia de sarampión en el Congo, sigue habiendo Ébola...", apunta.
Preparados
Salud Pública se ajusta al discurso lanzado por el Gobierno, la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona: están preparados. Las medidas extraordinarias, en cambio, corren a cargo del salón. "Si se hace el Mobile tomaremos las medidas de control que ya están en marcha. Si la organización del Mobile quiere poner otras medidas, será él quien lo haga".
Guix recuerda que si produjese un caso de contagio durante el evento no se discriminaría la persona por su procedencia. "Frente a cualquier situación que afecte la salud de las personas no diferenciamos entre gente de fuera y gente de aquí”, confirma.