Primer Premio Periodístico Pedro Vega de Crónica Global
La sociedad civil y económica homenajea a Pedro Vega en la entrega del premio periodístico de Crónica Global
La primera edición del premio que lleva su nombre reúne a referentes del periodismo, la empresa y la vida institucional para reivindicar su legado crítico y humanista
Más información: Cristian Segura y Susana Quadrado obtienen el I Premio Pedro Vega de periodismo
En el Palau Macaya, antes de que se abra el telón y los focos busquen a los premiados, la figura de Pedro Vega ya está plenamente presente. No porque sea un nombre que vuelva con nostalgia, sino porque en la mirada de los asistentes —empresarios, periodistas, académicos, representantes institucionales— resuena la misma idea: sin voces como la suya, el periodismo catalán y español sería hoy un territorio más pobre.
La primera edición del Premio Periodístico,organizado por el Grupo de Medios Global, que lleva su nombre ha actuado como catalizador de un reencuentro entre generaciones profesionales y sensibilidades diversas del ecosistema económico y social de Cataluña. En un momento en el que la información se mueve a velocidad de vértigo y los discursos se contaminan con facilidad, la reivindicación de Vega no solo es un gesto conmemorativo, es un mensaje político, cultural y profesional.
Un recordatorio de que la independencia y la crítica constructiva, lejos de ser actitudes románticas de otra época, siguen siendo una necesidad elemental.
Un legado que interpela al presente
Vega, cántabro de nacimiento y catalán de adopción, representa una biografía que parece escrita a contracorriente de cualquier manual de autopromoción: magisterio, militancia, juicio político, exilio, radio clandestina en París, reporterismo de calle en una España que salía del blanco y negro, prensa partidaria, televisión pública, comunicación corporativa y asesoramiento político y empresarial al más alto nivel.
Lo que se ha recordado este lunes es su estilo crítico, su enfoque crítico y valiente que lo convirtió en un referente poco común, un periodista que podía hacer preguntas incómodas tanto a un dirigente político como a un alto ejecutivo sin perder el respeto.
De ahí que el nuevo premio no nazca únicamente para preservar un legado, lo hace para provocar, para exigir, para abrir un espacio donde el periodismo recupere la ambición de ser útil a la sociedad.
Los ganadores
Dos voces consolidadas han estrenado el palmarés del Premio Pedro Vega. Susana Quadrado, redactora jefa de La Vanguardia, ha recibido el reconocimiento a Mejor artículo de opinión por un estilo incisivo, pegado a la vida cotidiana y atento a los debates que atraviesan cafés y sobremesas. Entre las piezas más valoradas figuran Mujeres a los cincuenta, sexo y feniletilamina; No es culpa de los jubilados boomers; Revuelta bisexual en la generación Z y ¿Quién barre Barcelona?.
Quadrado ha recibido el premio con un agradecimiento profundo y una emoción visible, destacando que el verdadero valor del galardón reside en que lo otorgan sus propios compañeros y compañeras, muchos de ellos vinculados al periodismo y a profesiones esenciales.
En su intervención, la periodista ha evocado también las conversaciones y dudas compartidas con personas cercanas, especialmente en momentos de presión informativa, insistiendo en que el periodismo no necesita voces polarizadas ni discursos simplistas, sino datos rigurosos y criterio propio.
Susana Quadrado, redactora jefa de 'La Vanguardia' y galardonada junto al director de 'Cronica Global' Ignasi Jorro
El premio a Mejor reportaje ha recaído en Cristian Segura, periodista de El País y corresponsal en Ucrania. Su capacidad para contextualizar escenarios complejos y guiar al lector por la lógica de la guerra ha sido determinante. Artículos como Donbás, el objetivo más preciado de la Nueva Rusia; Europa es la esperanza de los ucranios o La semana en la que Zelenski arriesgó su liderazgo destacan entre los seleccionados.
Segura ha asistido al acto por vía telemática puesto que actualmente se encuentra en el Ucrania, que sufre una nueva fase de bombardeos por parte de Rusia. El periodista de El País ha recordado que estuvo cuatro años en China trabajando, pero que este es su primer conflicto bélico. Sin embargo, ha asegurado que "se puede hacer igual o incluso mejor periodismo en l'Hospitalet de Llobregat que en cualquier otro lugar considerado más exótico o rimbombante".
Cristian Segura, periodista de 'El País' y galardonado
Periodismo valiente
Manel Manchón, actual director de Metrópoli Abierta, quien ha guiado la gala poniendo el foco no solo en la trayectoria profesional de Vega, sino también en lo más personal e íntimo, recordando así que detrás de cada historia periodística existe una vida, un recorrido y una voz.
De igual manera, Xavier Salvador, CEO y actual Editor de Crónica Global, ha tomado la palabra para reivindicar la esencia del oficio, recuperando alguna de las ideas esenciales de lo que significa el periodismo, algo "valiente, riguroso y libre" que debe evitar "toda forma de complacencia que debilite su función de vigilar al poder".
Salvador —previo a dar paso a la emotiva intervención de Elena, hija de Vega— ha cerrado su discurso con una de las frases más evocadoras de la noche, recordando que “el periodismo no se mide por el ruido que hace, sino por la luz que deja”.
Xavier Salvador, CEO y actual Editor de 'Crónica Global'
Asistentes del evento
La nómina de asistentes confirma el alcance cívico del homenaje. Han aportado su visión de Vega y el periodismo crítico que éste encarnó Carles Escolà, secretario de Medios de Comunicacion y Difusión del Govern, y Sergi Loughney, director general adjunto de Asuntos Corporativos de la Fundación ”la Caixa”. Tanto el Ejecutivo catalán como la entidad social han apoyado el galardón.
Entre los presentes también se han contado Felipe Campos, CEO de Aigües de Barcelona; Ciriaco Hidalgo, presidente del CTESC; el historiador Joaquim Coll; el escritor Ramón de España; el cónsul de Israel en Barcelona, Yosef David Sánchez-Molina; el cónsul de Eslovaquia, Francisco Javier Medina Ortiz; Gonzalo Baratech, presidente del consejo de administración de Crónica Global; Marc Gómez, director de Comunicación en Fundación 'la Caixa'; Antoni Garrell, presidente de HM Hospitales Catalunya; el escritor Juan Ramírez; Miquel Roca, uno de los padres de la Constitución; el exconseller Boi Ruiz; Jorge Navarro, socio y abogado penalista de Molins Penal; Ricardo Gómez de Olarte, de Claris Penal; el exlíder del PP catalán Alberto Fernández Díaz; el gestor cultural Fèlix Riera y el vicepresidente de Lideremos, Xavier Garcia Tort, entre muchos otros.
Una representación diversa que subraya el carácter transversal del reconocimiento a Vega y la vigencia de su influencia en ámbitos muy distintos de la vida pública catalana.
Un jurado plural
La composición del jurado es, en sí misma, una declaración de intenciones. Reúne a perfiles que representan distintas ramas del periodismo catalán y español, desde la investigación y la opinión hasta la economía, la comunicación institucional o la dirección editorial.
- Cristina Farrés, periodista y exdirectora de Crónica Global.
- Joaquín Romero, periodista y exdirector de Crónica Global.
- Jordi Juan, actual director de La Vanguardia.
- Elena Garrido, actual subdirectora de Metrópoli Abierta.
- Pere Rusiñol, periodista de medios como El País y El Periódico.
- Marcos Lamelas, periodista de El Confidencial.
- Fèlix Riera, director de la Societat Barcelonesa d’Estudis Econòmics i Socials.
- Eva Moll, economista y doctora en comunicación y periodismo
- Alberto Gimeno, periodista y profesor de la Universidad Ramon Llull.
- Mònica Bassas, licenciada en Ciencias de la Información y experta en comunicación corporativa
- Xavier Salvador, CEO y actual Editor de Crónica Global.
- Manel Manchón, actual director de Metrópoli Abierta.
Aspira a tradición
El estreno del Premio Periodístico Pedro Vega no es únicamente un homenaje retrospectivo. Es un pacto entre generaciones: quienes conocieron a Vega y quienes ejercen el oficio actualmente coinciden en que su figura recuerda algo esencial que a veces se olvida entre algoritmos, prisas y ruido digital.
Que el periodismo, cuando se hace con rigor y valentía, tiene la capacidad de mejorar una sociedad entera. Y que esa es —o debe ser— su verdadera utilidad.