El Ayuntamiento de Barcelona reabrirá El Molino como centro de creación cultural. La Administración local apostará por la gestión público-privada de la sala de variedades situada en el Paral·lel tras comprar el edificio a su dueño por 6,2 millones de euros, como avanzó Metrópoli Abierta.
Ha desgranado los detalles de la adquisición la propia alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que ha precisado que El Molino volverá a la vida integrado en las Casas de Cultura de Barcelona, una red de equipamientos culturales situados en los distritos de la ciudad.
Poca inversión
La operación de compra ha sido amistosa entre todas las partes. Según Elvira Vázquez, propietaria del espacio situado en la avenida Paral·lel, el ayuntamiento compra la sala por 6,2 millones, el precio de tasación.
Por su parte, la primera edil ha precisado que la reactivación del teatro "requerirá de muy poca inversión". El precio de compra y el presupuesto limitado para su reapertura permitirán una operación "importante" para la ciudad y evitarán, según Colau, que un fondo de inversión se haga con el equipamiento y lo "desvirtúe".
El bajo Paral·lel, pendiente del despegue
Ello no ocurrirá. Tras la compra por parte del Ayuntamiento de Barcelona, la Administración abrirá un concurso público para hallar a un gestor. Después y cuando eche a andar, El Molino reabrirá como Casa de la Musica de Barcelona, un proyecto de centros culturales públicos y gestionados junto a empresas que buscarán aportar creación y articular los barrios de la capital catalana.
Precisamente, quedan pendientes de incorporarse a este tejido la Sala Barts, también situada en el Paral·lel y que se convertirá también en Casa de la Música, y el Teatro Arnau, cerrado desde hace años y cuya restauración está en un cajón del ayuntamiento por falta de presupuesto.