El Ayuntamiento de Barcelona deja morir el teatro Arnau

Hace cinco años, el consistorio barcelonés se hizo con el teatro Arnau por 2,5 millones de euros. Mucho se ha hablado desde entonces sobre las posibilidades del local para atraer visitas y potenciar uno de los motores económicos del barrio del Paral·lel. Pero, sobre todo, de volver a darle un uso cultural y revivir el espíritu artístico de la zona.

“Hay que hacer una inversión importante en el Paral·lel. La dinamización cultural es una oportunidad para que resurja el entorno” explica a Crónica Global Alberto Fernández, presidente del Partido Popular en el Ayuntamiento de Barcelona. “Se habla mucho de que se recuperará pero lo cierto es que, día tras día, se degrada”, añade.

Necesaria rehabilitación

Según el grupo popular, el edificio está actualmente apuntalado, con problemas estructurales y en un estado de abandono absoluto, y se estima que las obras de rehabilitación serían de unos diez millones de euros. Una cifra “que el consistorio no parece estar dispuesto a asumir” y que tampoco tendría por qué.

“Nosotros entendemos que el teatro Arnau tiene que estar vinculado a las artes escénicas. A partir de ahí, el ayuntamiento puede disponer de diferentes ayudas por parte de asociaciones, puede optar por un gestor, puede compartir gastos”, explica Fernández.

Actos reivindicativos

Por su parte, el consistorio mantiene que “trabaja para darle un uso de futuro”. Una portavoz del Ayuntamiento de Barcelona ha asegurado a este medio que hay un proceso participativo abierto para dar voz a los vecinos, expertos, entidades y profesionales del mundo de la cultura y las artes escénicas. También ha asegurado que este verano se han realizado trabajos de desmontaje y limpieza en la estructura.

Alberto Fernández lamenta la manera de hacer de Ada Colau: “si antaño se hacían comisiones, ahora se hacen consultas. Es el tópico de su gobierno y, mientras, se perpetua la degradación”.

Mientras tanto, vecinos del barrio y plataformas como Recuperemos el Arnau llevan a cabo actos reivindicativos para presionar al consistorio y que se reabra el teatro. En el último, a mediados de julio, la misma Gala Pin asistió y publicó en sus redes una fotografía del evento, en la que añadía: “Ahora mismo suena una trompeta ante el Arnau reclamando que vuelva a ser un espacio con vida”.