La guitarra es uno de los instrumentos musicales más populares del mundo. Su amable curva de aprendizaje y, sobre todo, lo cómodo que resulta transportarla, hacen de ella una gran elección para iniciarse en el terreno de la música. Sin embargo, cuando alguien decide que la guitarra es el instrumento que quiere aprender, se abre ante un gran catálogo de opciones a considerar.
Guitarra acústica, española, de viaje, eléctrica, con o sin caja de resonancia, más o menos económicas… Existen casi tantos tipos de guitarras como músicos. Es lo que tiene ser un instrumento tan popular, lo cual es una gran noticia para los artistas, ya que los precios se abaratan y la oferta es muy amplia, aunque también es fácil perderse. Para ayudar a este tipo de compradores hemos confeccionado esta guía para escoger la guitarra perfecta.
¿Acústica o eléctrica?
Una de las grandes preguntas que se hacen los principiantes a la hora de escoger una guitarra es si será acústica o eléctrica. La respuesta depende del uso que se le vaya a dar. Para aprender, basta con cualquier guitarra, aunque las guitarras españolas y acústicas requieren menor inversión, ya que pueden tocarse sin la necesidad de conectarlas a un amplificador.
Por otro lado, las guitarras eléctricas pueden llegar a ser una apuesta de futuro, ya que si se compra un equipo adecuado, podrían servir incluso para tocar en directo en un concierto. Todo depende del uso que se le quiera dar al instrumento y de las perspectivas que tenga el músico. Otra buena opción, que une lo mejor de ambos mundos, es optar por una guitarra electroacústica, que permite aprender y ensayar en casa y que luego deja abierta la opción de enchufarla para tocar en un concierto.
¿Qué estilo o estilos se van a tocar?
La guitarra es un instrumento sumamente versátil. Esto permite que cualquiera con un poco de práctica pueda tocar cualquier canción que se proponga. Pero para que el sonido sea lo más parecido a lo que se quiere tocar habrá que analizar primero qué estilo se quiere tocar. Vaya por delante que con cualquier guitarra se puede interpretar cualquier canción y estilo, pero lo más lógico es que si se quiere tocar, por ejemplo, hard rock, metal o heavy, se opte por una guitarra eléctrica para que los sonidos se asemejen más a los de los grupos que afines a esa persona.
Si el estilo del músico va más hacia la canción de autor, el folk o el blues, quizá una guitarra acústica sea la opción más recomendable. Al menos al principio, para practicar cómo tocar con los dedos, lo que se conoce como la técnica del fingerpicking o el rasgueo con púa.
Tipos de guitarra más comunes
Una vez tomada la decisión de si se quiere una guitarra eléctrica o acústica, el siguiente paso será decidir qué tipo de guitarra se compra. No todas suenan igual, aunque comparten elementos comunes. En las guitarras eléctricas, se puede hacer una rápida diferenciación por el tipo de pastillas que llevan los instrumentos. Las que tienen pastillas de bobinado simple (o single coil) ofrecen un sonido más ligero y brillante. Las más reconocidas son las que fabrica Fender, en especial la Telecaster (que toca siempre Keith Richards, de los Rolling Stones) y la Stratocaster (que ha hecho famosa, entre otros, Eric Clapton), y todos los modelos derivados de éstas.
La otra cara de la moneda son las humbuckers o pastillas de bobinado doble, que permiten engordar mucho más el sonido. Son las utilizan gran parte de las guitarras de Gibson (y sus imitaciones). Por ejemplo, la icónica Les Paul que utiliza el guitarrista de Guns’n’Roses Slash, o la no menos reconocible SG del guitarrista de AC/DC Angus Young.