Lluís Pasqual, que dimitió el pasado sábado como director del Teatre Lliure, ha recibido diversas muestras de reconocimiento por parte de los principales responsables de la escena catalana.
Pasqual, que presentó su renuncia tras ser acusado de prácticas humillantes por parte de su equipo, ha obtenido el aplauso de directores de teatro como Cesc Casadesús y Salvador Sunyer a su labor artística al frente del Lliure durante las últimas cuatro décadas de manera intermitente.
Falta de apoyo de su equipo
Considerado como uno de los directores más destacados de la escena catalana, el cofundador del Lliure dejó su cargo ante la falta de apoyo de sus colaboradores. El ambiente empezó a enrarecerse con la noticia de su renovación sin concurso público, pese a que el detonante fue la propagación en las redes sociales de las acusaciones de mobbing.
Pasqual asegura que siempre había tenido el pleno apoyo de todos los teatros que ha dirigido, algo "absolutamente imprescindible para llevar adelante un proyecto que, en las condiciones actuales, no me siento capaz de liderar".
El Grec reconoce a Pasqual
Directores de renombre de la escena catalana como Cesc Casadesús, responsable del festival Grec, ha mostrado hoy su respeto profesional hacia Pasqual y su tristeza "porque se haya marchado de esta manera del teatro".
También ha llamado a la reflexión y ha mostrado su perplejidad por cómo ha ido derivando el caso Pasqual, después de que desde las redes sociales se le acusara de "prácticas abusivas contrarias a los derechos laborales", aunque cree que son "hechos no demostrados".
El silencio del TNC
Salvador Sunyer, director del Festival Temporada Alta, también se ha pronunciado y ha señalado que, si él ha decidido dimitir, le parece bien porque "no es lo más agradable" dirigir una institución teniendo a alguien en contra.
En cambio, fuentes del Teatre Nacional de Catalunya (TNC) no han querido pronunciarse sobre lo ocurrido en los últimos días en el Teatre Lliure “por respeto institucional”.
Relevo en el Teatre Lliure
La consellera de Cultura de la Generalitat, Laura Borràs, ha destacado hoy la figura de Lluís Pasqual: "Es un gesto que le honra, pero supone perder su potencial en el Teatre Lliure".
Borràs ha lamentado que la renuncia responda a una "falta de confianza" de su equipo y ha recordado que el patronato tiene prevista una reunión para el viernes 14 de septiembre, cambiando el orden del día para poder tratar este asunto. Para escoger al nuevo director se debe iniciar un proceso de renovación de los actuales estatutos, puesto que se optará por "un concurso abierto y con un mandato de cuatro años prorrogable a otro, siempre consecutivo".