Una foto de archivo de Lluís Pasqual / TV3

Una foto de archivo de Lluís Pasqual / TV3

Creación

Lluís Pasqual dimite como director del Teatre Lliure

El cofundador del teatro se ve obligado a dejar su cargo por la división interna de la entidad tras salir a la luz la acusación de una actriz a la que presuntamente humilló durante un ensayo

1 septiembre, 2018 10:58

Lluís Pasqual ha dimitido como director del Teatre Lliure tras mandar una carta al patronado del Lliure para anunciar su decisión de forma oficial. Las presiones y críticas recibidas desde las redes sociales y algunas personas del entorno de la entidad han obligado al cofundador del teatro a abandonar su cargo. Algo que ha citado en dicha carta.  

Todo empezó hace un mes y medio, cuando una actriz le acusó de humillarla durante un ensayo. La joven, Andrea Ros (Terrassa, 1993), publicó un post en Facebook  que se hizo viral. En el escrito, relataba el momento en que durante un ensayo de la obra 'El rei Lear', Pasqual la humilló. "Pasqual me ha gritado, me ha ridiculizado, me ha puesto en evidencia y le he visto hacerlo impunemente porque ‘es un genio’ y los genios gritan y tratan mal a la gente". Algo a lo que Pasqual ha hecho mención en su carta de renuncia. 

Él mismo explica que las acusaciones son totalmente infundadas y, aunque no dimite por ellas, considera que no puede dirigir un teatro internamente dividido y sin un equipo cohesionado. 

Rechazo a la renovación al cargo

Pasqual, que fundó el treatro en 1976 y había vuelto a dirigir la entidad en 2011, había recibido una propuesta de renovar su cargo como director. Su contrato finalizaba a finales de esta temporada y había recibido una propuesta para dirigir la entidad por dos temporadas más.  

La crisis se agrandó cuando otro colectivo, llamado 'Dones i Cultura', aseguró que Pasqual había tratado despóticamente a algunos empleados del Teatre. El conflicto saltó a los medios y las presiones han podido con el director.

La nueva programación del teatro contaba con dos obras bajo su dirección que tendrán que reprogramarse.