José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica, en las jornadas del Círculo de Economía / EP

José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica, en las jornadas del Círculo de Economía / EP

Business

Pallete carga contra el regulador ante posibles fusiones: “Nos tienen maniatados”

Telefónica reclama su papel en el proceso de consolidación del sector e insiste en que en el actual escenario ya no es un operador dominante

24 febrero, 2022 14:09

El presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, ha reivindicado el papel que debería tener la compañía en el proceso de consolidación que actualmente se está dando en el sector ante lo que considera una situación injusta por parte de los reguladores, que siguen considerando a la compañía como operador dominante cuando, a su juicio, ya no lo es.

“Ahora que viene una posibilidad de consolidación llega el momento en que las autoridades deben empezar a reconsiderar la política de competencia; y desde Telefónica reclamamos nuestro derecho a que así se haga”, ha señalado el ejecutivo, quien además considera que la compañía “está maniatada por unas condiciones que ya no se corresponden con la época en la que se impusieron”.

Un "sinsentido"

En la rueda de prensa posterior a la presentación de los resultados anuales de la compañía, Álvarez-Pallete se refirió a las operaciones de fusión que se están planteando en España y reclamó el papel que Telefónica debería representar.

“No renunciamos a participar en este proceso, en la parte que nos pueda tocar”, ha apuntado al tiempo que ha reiterado el sinsentido que supone el hecho de que haya tal cantidad de actores en el panorama europeo del sector. “No tiene sentido que en España haya más operadores que en China ni que en Europa haya más de 400 operadores móviles; es imposible que seamos competitivos si a cada compañía le corresponde poco más de un millón de habitantes”.

Restricciones en el fútbol

El máximo responsable de la compañía de telecomunicaciones ha enmarcado también sus críticas a los reguladores en el contexto de las retransmisiones deportivas, en concreto de los derechos de la Liga de fútbol, que acaba de adquirir de nuevo, en este caso junto a la plataforma DAZN.

Preguntado por el límite de tres años impuestos por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), Álvarez-Pallete ha recordado que restricciones como ésta proceden de la época en que Telefónica adquirió la plataforma Digital Plus. “Ya no estamos en este contexto, no somos un operador dominante; y lo único que reclamamos es competir en igualdad de condiciones. No queremos que regulen a los demás, sólo pedimos que nos ‘desregulen’ a nosotros”.

Nueva filial de fibra

Al margen de la polémica por las condiciones regulatorias, a la que ha prometido dar continuidad (“vamos a ser muy intensos en estas reclamaciones”, ha llegado a decir), el aspecto que más ha llamado la atención ha sido la creación de una nueva compañía para llevar la fibra a las zonas de menor densidad de población en España.

En este punto, Ángel Vilá, consejero delegado de Telefónica, ha detallado que la pretensión es que la fibra de la compañía llegue a cinco millones de hogares de estas zonas, a través de un vehículo “con capacidad de hacer nuevos clientes, de crecer y también de atender a la llamada España vaciada, que es un compromiso de Telefónica”.

Posibles recompras "tácticas"

En cuanto a la medida de volver al dividendo únicamente en efectivo, el presidente de la compañía ha explicado que la modalidad de ‘script’ (que da a elegir al accionista entre cobrar el dividendo en metálico o en títulos de la empresa) fue adoptada “en unos años circunstancias especiales, tanto por la pandemia como por las sucesivas subastas de espectro”, relacionadas con la red 5G en los mercados en los que opera.

Telefónica no descarta llevar a cabo recompras de acciones para su posterior amortización como forma de completar la remuneración al accionista, dada la buena evolución del flujo de caja, aunque Álvarez-Pallete ha matizado que, en todo caso, se tratará de “operaciones tácticas” y siempre que no se ponga en peligro la estabilidad del rating de la empresa en grado de inversión.