iDental acaba como el rosario de la aurora

Sobre la otra, Medical Global Investments (MGI), gravita un concurso necesario, admitido a trámite por el Juzgado Mercantil número 6 de Madrid el pasado mes de junio.

Tocata y fuga

Cuando van transcurridos tres meses desde que se dio curso a este último expediente, dicha instancia todavía no ha podido emplazar a la empresa ni a su administrador, porque ambos están en paradero desconocido. En los anales empresariales no existen muchos precedentes de una sociedad declarada en quiebra, que desaparece del mapa sin dejar rastro alguno.

La firma promotora de la quiebra necesaria es Ziacom, a la que MGI adeuda 1,6 millones de euros, correspondientes a ocho pagarés y 60 facturas impagados.

El Pequeño Ratero SL

Ziacom elevó ayer al Juzgado Mercantil número 6 de Madrid sendos escritos con abundante información sobre las dos compañías quebradas. En uno de ellos subraya que Dental Global Management es administradora de MGI y a tal efecto tiene designado como representante a José Luis González Sánchez. Este, a su vez, es el administrador de Dental Global Management.

Tal como explicó Crónica Global ayer, dicho individuo aparece en los Registros Mercantiles como administrador, apoderado o socio de más de cien compañías, una de ellas con la sugerente razón social de “El Pequeño Ratero SL”.

Gestor “linajudo”

“Todo ello nos hace presumir –se lee en uno de los escritos– que de tal “oficio” el citado señor ha hecho un medio de vida. Mucho nos tememos que el señor González Sánchez, ni sea un brillante y linajudo gestor disputado y pretendido por ese centenar de sociedades, ni un acaudalado inversor que con tales cargos vigile sus intereses personales, ni persona –como ya se ha comprobado- de fácil localización, lo que choca aún más habida la ingente cantidad de cargos, nombramientos y participaciones en los capitales de innumerables sociedades que tiene el citado señor”.

“La demandada se conduce de forma ajena a la norma jurídica incumpliendo hasta provocar con sus acciones y omisiones la alarma pública, lo que ha generado grandes perjuicios a clientes, acreedores e instituciones públicas”.

“Es ya una irremediable realidad el cierre, sin mediar pacto, acuerdo ni aviso, de todas sus instalaciones y puntos de atención. Las reclamaciones de los damnificados superan cotas inimaginables”.

La doble quiebra de iDental, que acabará arrastrando a las más de sesenta filiales, significa el entierro definitivo de esta red de centros odontológicos. Dado el ingente número de afectados, repartidos por todo el país, y el volumen de deudas todavía por cuantificar, no es descartable que el asunto acabe ventilándose en la Audiencia Nacional.