Entrada a una sede de Microsoft

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Confidente VIP

Microsoft, un montaje empresarial y tributario indescifrable

La trasnacional estadounidense ha articulado un frondoso y enmarañado montaje para rebajar al mínimo su carga fiscal

19 junio, 2018 23:55

El meollo de los problemas de Microsoft con Hacienda es la peculiar forma que tiene de facturar las ventas que realiza en España y el montaje societario que las sustenta.

Sobre el papel, las compañías del grupo que operan en el país no venden un solo producto o programa informático. Lo que facturan son servicios y asesoramientos. Nada más.

En la cima del montaje del grupo se encuentra Microsoft International Holdings Spain (MIHS), filial directa de la corporación estadounidense Microsoft. De MIHS dependen a su vez Microsoft Ibérica y la subsidiaria escandinava Microsoft Danmark.

Irlanda, centro de operaciones

Tales compañías obtienen ingresos por la prestación de servicios de soporte en ventas y marketing, en investigación y desarrollo, asesoramiento en cuestiones operativas y financieras, más asistencia técnica y consultoría.

Todos los productos que comercializa el grupo en el mercado peninsular se facturan desde Microsoft Ireland, país donde disfruta de unas condiciones fiscales privilegiadas.

Microsoft Ibérica devenga una comisión de la empresa irlandesa, pero no por los productos comercializados, sino por su apoyo en marketing y ventas.

A su vez, Microsoft Ibérica y Microsoft Danmark tienen suscritos contratos con la holding mundial Microsoft Corporation, en virtud de los cuales aquellas se encargan de verificar que los programas del grupo cumplen con los requisitos legales y regulatorios de aplicación en España y Dinamarca.

Por último, MIHS brinda a la corporación apoyo en servicios financieros avanzados.

Montaje societario

MIHS, Microsoft Ibérica y Microsoft Danmark reciben como remuneración por los servicios que prestan a la holding mundial y a la empresa irlandesa, una contraprestación equivalente a los costes incurridos por los servicios prestados, más un porcentaje.

Además de todo ello, el entramado tributa en España como grupo consolidado. En él se encuadran MIHS como sociedad de cabecera, más las dependientes Microsoft Ibérica y Microsoft Mobile Sales International OY Sucursal en España, de Helsinki (Finlandia). La filial danesa tributa en su país con su propio grupo consolidado.

Por si todo esto fuera poco, MIHS tiene la consideración de Entidad de Tenencia de Valores Extranjeros o ETVE, instrumento que también encierra beneficios fiscales. Gracias a ello, en 2017 se apuntó rentas fiscalmente exentas de 24,5 millones.

Toda esta enrevesada arquitectura responde a una sola finalidad: reducir la carga tributaria a la cota más baja que sea factible.