Formica cierra el octavo ejercicio en negativo
El fabricante de revestimientos y laminados Formica no levanta cabeza y acumula pérdidas un ejercicio tras otro. Los gestores de la casa preveían que en 2015 se rompería definitivamente la racha y volverían los beneficios, pero por desgracia no se ha cumplido el vaticinio. Las cuentas se cerraron con un déficit de 402.000 euros, si bien entraña un sensible recorte en comparación con los 3,3 millones de 2014. De esta forma, la compañía encadena ya ocho ejercicios consecutivos de quebrantos, con un importe acumulado de 77 millones.
En los últimos quince años la entidad ha contabilizado tres con beneficios y doce con pérdidas, con un saldo deficitario total de 106 millones.
Ajuste laboral
Formica pertenece desde 2007 a la multinacional Fletcher Building, una de las constructoras más descollantes de Australia y Nueva Zelanda. La integración de los negocios de Formica en Fletcher dio lugar a la configuración del mayor fabricante del mundo de superficies decorativas y laminados a alta presión.
Las reiteradas pérdidas de la filial española se han producido en paralelo a una notable reducción de sus actividades en el país. En 2012 cerró su planta industrial de Galdakao (Vizcaya), donde de antiguo radicaba la sede social. Hace pocas semanas ha trasladado el cuartel general al municipio valenciano de Albal, donde cuenta con otro centro fabril. En el último lustro la plantilla se ha reducido de 500 a 250 personas.