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La aventura empresarial a tres bandas entre el exfutbolista del FC Barcelona Gerard Piqué, LaLiga y Port Aventura World toca su fin.

Los proyectos para lanzar un parque temático dedicado a la competición futbolística, con inversiones previstas que superaban los 100 millones de euros, deberán esperar una mejor ocasión.

En las últimas semanas se ha procedido a la liquidación de LaLiga Entertainment, sociedad constituida para dar forma a la alianza entre la patronal que organiza las competiciones de fútbol profesional en España, Port Aventura y Kosmos, la empresa fundada y controlada por Piqué y especializada en la celebración de eventos y torneos deportivos. 

Creada en plena pandemia y puesta en marcha durante los meses de recuperación de la crisis generada por el coronavirus, la iniciativa perseguía el objetivo de crear nuevas experiencias, con la combinación del ocio y el entorno digital.

Proyectos enfocados al aficionado al fútbol pero también con espacio para el público en general. Los planes de LaLiga Entertainment pasaban por el desarrollo de una cadena de restaurantes temáticos, basados en la competición de fútbol que atrae cada semana entre agosto y mayo a millones de aficionados en todo el mundo.

Javier Tebas, en un fotomontaje con el acto de la presentación del logotipo de la Liga de fondo MONTAJE CULEMANIA

Dentro de esta primera etapa también entraba la creación de un videojuego basado en la Liga, los clubes participantes y las principales estrellas de la competición.

Pero, sin duda, el elemento más atractivo era el de la construcción y explotación de un parque temático de LaLiga en el recinto de Port Aventura, en la Costa Dorada. Un desarrollo más a largo plazo y demandante de una mayor aportación de capital que, finalmente, no ha llegado. 

Restaurantes y videojuego

A lo largo de estos años de vigencia de LaLiga Entertainment sí han visto la luz los dos primeros objetivos, aunque su repercusión no ha sido la esperada. El recinto de Port Aventura albergó el primer local del restaurante Twenty Nine’s, con temática futbolística. 

La Gran Vía madrileña fue el lugar escogido para la apertura del segundo establecimiento de la cadena; desde hace unos meses permanece cerrado al público; no obstante, durante los meses anteriores los usuarios ya habían expresado numerosas críticas por el estado de abandono que reflejaba el negocio.

También ha pasado un tanto desapercibido el videojuego ‘Land of Goals’, especialmente pensado para móviles y que pretendía reproducir partidos en un formato tres contra tres, con los clubes de la Liga y sus estrellas como protagonistas. 

No ha sido la mejor noticia para la alianza la salida de Port Aventura del que fuera su director general David García Blancas, uno de los más implicados en el proyecto. La incorporación al consejo de administración de Gerard Piqué y sucesivas ampliaciones de capital, hasta el entorno de los 3,5 millones de euros, tampoco han sido suficientes para sacar adelante los planes.

David García-Blancas, director de negocio de PortAventura World Cedida

El que fuera central del FC Barcelona y de la selección española en las etapas más brillantes de ambas instituciones ya contaba con experiencia en los negocios relacionados con el deporte. Poco antes de la pandemia, Kosmos participó en el diseño y puesta en marcha del nuevo formato de la Supercopa de España junto a la Real Federación Española de Fútbol, presidida por entonces por Luis Rubiales

La competición se articula desde entonces con un formato de cuatro participantes y se disputa en Arabia Saudí, merced a un contrato multianual que se extiende hasta el final de la presente década. 

Los últimos intentos

Con anterioridad, Kosmos también había acordado con la Federación Internacional de Tenis un nuevo formato de la Copa Davis, la histórica competición disputada entre países.

Piqué se incorporó a un consejo liderado por el presidente de LaLiga, Javier Tebas, en el que también estaban presentes el citado García Blancas y el consejero delegado de Port Aventura, Fernando Aldecoa, entre otros.

La última de las ampliaciones fue aprobada en junta de accionistas el pasado mes de marzo, por valor de algo más de dos millones de euros; un último intento por revivir la sociedad, que finalmente ha desembocado en su disolución voluntaria.