Veolia integrará cerca de 100 marcas y sus respectivas operaciones. El líder mundial en transformación ecológica unificará la organización con los mimbres que le dan su buen desempeño: ha alcanzado antes de tiempo los objetivos para España del plan estratégico GreenUp --previstos para 2027-- y ya prepara uno nuevo.
Lo ha detallado hoy miércoles Daniel Tugues, director país de Veolia en España, quien ha querido reafirmar el compromiso del grupo con Barcelona, donde mantendrá la marca Agbar, con "personalidad local", al mismo tiempo que acomete la unificación operativa y de marcas en todo el país.
"Más ágil"
En un desayuno con medios de información, Tugues ha destacado que la integración de enseñas --engarzado en la visión One Veolia y con un calendario de ejecución de seis meses--, un centenar en toda España, permitirá tomar decisiones de forma más ágil y compartir globalmente el know how que atesora la compañía.
Daniel Tugues, director país de Veolia en España
En clave interna, la fusión de operadores regionales apuntalará las tres áreas clave de trabajo para el conglomerado, que son la gestión del ciclo del agua, el tratamiento y valorización de residuos o la implantación de soluciones de eficiencia energética en, por ejemplo, edificios o sedes corporativas.
En este último negocio, Veolia cuenta con cerca de 5.000 clientes en todo el país.
Objetivos logrados
La nueva estructura interna de la multinacional reposa sobre sólidas cifras coyunturales. El country manager de Veolia en España ha revelado que la firma ha alcanzado antes de tiempo los objetivos nacionales del plan estratégico GreenUp, previsto para durar hasta 2027.
Al haber logrado las metas, la marca prepara ahora una nueva hoja de ruta que presentará próximamente.
"España, país clave"
En ese nuevo marco de trabajo para la empresa, que presume de 18.000 empleados en toda España, el mercado nacional será "clave", ha subrayado Tugues.
Una planta potabilizadora de Agbar
Dicho y hecho. El alto ejecutivo ha remachado la cifra de inversión-país 300 millones de euros anuales, cifra aportada en 2024. Ese esfuerzo se ha mantenido en 2025 y lo hará también en 2026.
De nuevo, los proyectos se centran en el core de la compañía, que son tres: ciclo del agua (74% de ingresos), residuos (4%) y descarbonización (19%). En estos tres campos, el apetito inversor de Veolia queda claro en la clasificación del llamado Perte del agua, en el que el grupo ha copado el 40% de las ayudas a innovación y desarrollo.
Crecimiento del 9%
El mapa de actuaciones presentado por Veolia hoy se sostendrá sobre una robusta cuenta de resultados. A la espera de conocer los datos de 2025, el conglomerado recuerda que cerró el ejercicio anterior con unos ingresos de 2.800 millones de euros, un 9% más que los doce meses precedentes.
De 2023 a 2030, la facturación crecerá un 40%. Es una senda de crecimiento que, presumiblemente, se revisará al alza por el buen comportamiento de la diferente cartera de negocios.
'Partner' contra el cambio climático
Negro sobre blanco, Veolia se ofrece a administraciones públicas y operadores privados como el socio de referencia en el combate contra el cambio climático, ha destacado Tugues. El directivo ha destacado que según sondeos de la empresa, el 72% de los españoles ya pide que se tomen medidas preventivas y correctoras con el medio ambiente.
Una de las plantas de Ecoenergies, donde se crea energía a partir de biomasa
En ese campo, ha agregado el también exdirector general de Aguas Andinas, su organización puede arrimar el hombro. Un ejemplo: en el terreno del agua, la enseña ha planteado a las administraciones catalanas que se garantice el suministro del agua "independientemente de la meteorología, llueva o no". Ello sería posible gracias a tecnologías de regeneración de agua --en la última sequía de 2023, un tercio del agua que consumían los barceloneses ya era reutilizada--.
En los otros dos terrenos, la firma cuenta con proyectos de intervención, como Ecoenergies, de generación de energía a partir de biomasa, o el Centro Integral de Valorización de Residuos de Mataró, que recupera 250.000 toneladas de deshechos al año.
