Sa Trinxa, en Ibiza
Lío por la normativa de un parque natural de Ibiza: "Dejan a los chiringuitos sin música, pero se permite la venta ambulante"
Los restaurantes de Ses Salines, en pie de guerra contra la estricta ley
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Lío en uno de los lugares más bellos de Ibiza a causa de la estricta normativa para proteger la zona. Los chiringuitos de la playa de Sant Jordi, en el parque natural de Ses Salines, denuncian que el Govern les prohíbe poner música, mientras permite la presencia de vendedores ambulantes, entre otros agravios.
Fue el histórico chiringuito Sa Trinxa, con medio siglo de vida y uno de los cuatro que hay en la zona, el que explicó en sus redes sociales lo ocurrido, sin entrar en más detalles: "Sa Trinxa suspende las sesiones de DJ por la normativa del parque natural". Sin embargo, fuentes conocedoras del lugar aportan más información al respecto.
Unos 70.000 euros al día en párking
"El ayuntamiento ha cerrado la música por ser parque natural, pero cobra siete euros por coche --y van 10.000 coches al día--, al tiempo que se permite la venta ambulante, pero no hay papeleras ni tampoco seguridad", denuncia un visitante a Crónica Global.
El mensaje de Sa Trinxa ante la prohibición de poner música
Asegura que Ibifor, la empresa gestora del espacio, "podría hacer más", pues recauda 70.000 euros al día solo con el párking. Y ni siquiera hay vigilantes de seguridad, solo "un par de chavales" que poco podrían hacer con tanta afluencia.
Excepciones
Por su parte, la Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, argumenta que las fiestas, conciertos y todo tipo de eventos, tengan o no carácter multitudinario y se celebran en las playas, medio natural, o establecimientos de la zona, son incompatibles con el parque natural.
Las únicas excepciones son las fiestas tradicionales o las impulsadas por la Administración.