El puente de la Purísima es el punto de partida de la temporada de invierno en el Pirineo de Girona. Del 5 al 8 de diciembre, la previsión de ocupación en territorios de la demarcación como La Cerdanya y el Ripollès se sitúa entre el 85% y el 90%. Principalmente, los visitantes ocuparan hoteles, apartamentos turísticos, cámpings y casas de turismo rural.
Desde el Patronato de Turismo de la Diputación de Girona se reconoce que los datos de los dos últimos ejercicios en los Pirineos han sido desfavorables por la inestabilidad meteorológica y la falta de precipitación que ha repercutido directamente en la actividad del esquí.
Un descenso de un 10% en el número de visitantes
En este sentido, según el Observatorio de Turismo Eurecat, entre enero y octubre de 2024, las comarcas de montaña en Girona (Cerdanya, Ripollès y la Garrotxa) han recibido 809.088 visitantes que han generado 1,8 millones de pernoctaciones, una cifra que representa un descenso de un 10% en comparación con el mismo período del año anterior.
“El sector turístico del Pirineo de Girona trabaja para impulsar un modelo turístico responsable y sostenible en el territorio, todo con el objetivo de desplegar políticas y estrategias que permitan un desarrollo equilibrado de la actividad”, afirma Joan Plana. En este sentido, el vicepresidente del Patronato de Turismo Costa Brava Girona de la Diputación de Girona apuesta por “velar por la convivencia entre residentes y visitantes”.
La temporada de invierno 2024-2025 en los destinos de montaña del Pirineo de Girona también presenta nuevas propuestas turísticas como la ruta de los miradores de la Cerdanya y los mercados temáticos y de Navidad.
A partir de las 15h de este jueves y hasta las 15h del viernes, Tránsito calcula que unos 450.000 vehículos saldrán del Área Metropolitana de Barcelona. En Andorra, la agencia de Movilidad prevé que, entre el 5 y 8 de diciembre, entren al país 58.100 vehículos. Del total, 43.400 entrarían por la frontera con España y el resto por el paso que comunica con Francia.
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