Endesa prevé elevar un 8% sus inversiones en los próximos tres años para un total de 9.600 millones de euros hasta 2027. La cifra supone un máximo histórico para la eléctrica, con un incremento en valor absoluto de 700 millones respecto a lo establecido por el plan original para el periodo 2024-2026.
La actualización de la hoja de ruta de su matriz, la italiana Enel, ha revisado al alza las cifras de Endesa. Al mismo tiempo, el consejo de la compañía ha extendido la política de dividendos, consistente en repartir el 70% el beneficio neto, hasta el final del programa, en 2027.
En los próximos años, Endesa centrará sus esfuerzos inversores al negocio de la electrificación, con 4.000 millones de euros destinados a las redes, un 45% del total.
De esta partida, un 45% se destinará a cumplir los objetivos del Plan Integrado de Energía y Clima (Pniec) y atender la creciente demanda de nuevas conexiones, que actualmente se pueden ver rechazadas por falta de capacidad; otro 25% será para mejorar la calidad del servicio; y el 30% restante a la digitalización y modernización, mediante la renovación de componentes, la actualización de la flota de contadores inteligentes y la monitorización y control remotos.
Además, Endesa se ha marcado como objetivo alcanzar un resultado de 2.200 millones de euros a la finalización de 2027.
Menos solar
Mientras, la inversión en renovables llegará a los 3.700 millones. Endesa se centrará en activos de mayor valor, como los hidroeléctricos, en detrimento de otras tecnologías, como la solar, un segmento en el que reducirá su exposición.
Con la adquisición y la inversión en nuevos activos, la producción renovable del grupo crecerá un 32% al final del periodo, situándose en 25 teravatios hora (TWh).