Barcelona y Sant Joan Despí acogen gran parte del ecosistema químico de Cataluña

El mundo químico en Cataluña mueve una cifra de negocio de unos 28.800 millones de euros, cifra que representa el 22% de la actividad global industrial. A su vez, en la comunidad autónoma, el sector genera una ocupación de 85.200 trabajadores y unas exportaciones de casi 26.000 millones. Según datos del Área Metropolitana de Barcelona, el territorio metropolitano acoge un total de 838 empresas químicas. Las 50 empresas con mayor facturación se alojan entre la capital catalana y Sant Joan Despí. En clave supramunicipal y autonómica, el perfil predominante son las microempresas con más de 100 personas en plantilla. 

Sin dejar el ámbito laboral en el sector químico, en los últimos años se ha incrementado el número de trabajadores y trabajadoras con estudios universitarios y Formación Profesional. En cuanto a género, el 58% del personal investigador en Barcelona y su entorno más próximo es femenino y casi la mitad de los estudiantes de estudios químicos de FP son mujeres.

Trabajadores con FP y estudios universitarios

Precisamente, el tejido universitario y formativo, con la Universitat de Barcelona y la Universitat Politècnica de Catalunya a la cabeza, es uno de los principales atractivos que las empresas químicas tienen en cuenta para establecerse en Cataluña. Desde el Área Metropolitana de Barcelona se han redoblado los esfuerzos para dirigir el talento de las aulas hasta posiciones relacionadas con la Inteligencia Artificial, el denominado como Internet de las Cosas y el Big Data. 

Las sinergias con la logística permiten multiplicar el efecto de la actividad económica con el parque químico de Tarragona. Junto a Barcelona, esta zona comparte el liderazgo de la actividad del sector en el sur de Europa con la presencia de 33 multinacionales que se reparten unas 1.200 hectáreas de producción. Concretamente, el impacto de dichas empresas llega a los municipios de Tarragona La Canonja, Reus, Vila-seca, Constantí, El Morell, La Pobla de Mafumet, Perafort-Puigdelfí, Tortosa y Reus. El movimiento generado en el complejo químico supone el 65% de las actividades del Puerto de Tarragona.

Exterior de la planta de IQOXE en Tarragona Europa Press

Hace pocas semanas, en tiempo de descuento de la legislatura, el entonces consejero de Empresa y Trabajo, Roger Torrent, expuso cómo una inversión de 30 millones de euros, por parte de la Generalitat en el mundo industrial, había generado 19.150 nuevos puestos de trabajo. El 11,4% de las ayudas se han destinado a empresas químicas.