El consejo de administración de Aena ha aprobado una subida de tarifa de cinco céntimos por viajero. De esta manera, el ingreso máximo anual ajustado por pasajero (IMAAJ) se va a situar en los 10,40 euros, una cifra que entrará en vigor el próximo 1 de marzo de 2025.
Esta es la segunda actualización al alza que se lleva a cabo de la tarifa, tras haber permanecido diez años congelada. Aun así, la propuesta para el próximo año es inferior al alza del 4,09% que han afrontado las compañías aéreas en el presente ejercicio, tal y como remarcan desde la compañía que gestiona los aeropuertos de todo el país.
Cómo luchar contra la inflación
Aena ya anunció en junio que propondría al encargado de competencia una subida de sus tasas aeroportuarias inferior al 1% para 2025. Este incremento tiene como objetivo hacer frente al aumento generalizado de los costes derivado de la inflación.
La actualización de las tarifas aeroportuarias se realiza en función de elementos como los costes de personal -incluida su subida salarial del 3,5%-, así como gran parte de los servicios que presta en sus instalaciones. Entre ellos, la navegación aérea; la seguridad; la conservación, limpieza o atención a personas con movilidad reducida; el suministro de energía en todas las instalaciones o pago de tributos.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) tendrá que dar el visto bueno final a la propuesta de tarifa que lanza el consejo de administración de Aena. Cabe recordar que el gestor aeroportuario tiene vetadas por ley las subidas por encima del 0% antes del ajuste por variación de costes hasta 2025. Después de este ejercicio, cuenta con más margen para revisar sus ingresos.
Las tarifas "más competitivas" de Europa
Tanto el Gobierno como la compañía dirigida por Maurici Lucena han defendido la necesidad de subir las tasas aeroportuarias para hacer frente al aumento de costes derivado de la inflación y el aumento de tráfico.
Según Aena, incluso con la subida, las tarifas continuarán siendo las más competitivas de Europa. En la comparativa con otros hubs de conexiones europeos, los precios por operar en Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat llegan a estar hasta un 60% por debajo de la media tarifaria ofrecida en otros aeropuertos como Londres-Heathrow, París Charles de Gaulle, Fráncfort y Ámsterdam.
Bajada de tarifas en ocho años
Aena ha reiterado en varias ocasiones que, además, lo que pagan los viajeros por volar actualmente es menos que la tarifa de 2019. Entre 2015 y 2023, han bajado nominalmente un 11%.
En ese periodo, la inflación ha sido del 21%. Por todo ello, y en términos reales, han bajado un 32% en los últimos ocho años.
Rechazo de la patronal
Desde las compañías aéreas rechazan nuevas subidas tarifarias y se advierte que podrían afectar a sus posibles inversiones futuras. La patronal ALA considera que se trata de una decisión equivocada, ya que compañías aéreas todavía se están recuperando de los efectos del coronavirus.
En su opinión, la subida provocará un incremento de precios de los billetes, lo que puede afectar al tráfico y, por extensión, al turismo.