Las empresas del sector industrial no encuentran personal. El Fórum amec 2024, ha puesto el foco en una problemática que preocupa a las compañías del sector, las cuales admiten que esto es un impedimento "muy grande" para llevar a cabo sus planes y objetivos. Una de las principales consecuencias de esta falta de talento, es que se pronostica un vacío de 200.000 ingenieros en el sector industrial hasta 2030.
La ponencia "La era del capital: humano", a cargo de Santiago García, fundador de Future for Work Institute, ha arrojado algunos datos clave de por qué las empresas, a pesar de la demanda, no encuentran personas.
"Uno de los mayores obstáculos de las empresas es el talento", ha destacado. García se centra en las brechas de habilidades en el mercado laboral, la incapacidad de las empresas para atraer talento y, también, en las brechas de habilidades entre los líderes de la organización. Un ejemplo que ha resaltado, es el perfil de manager técnico: "Cuando una empresa nombra a un técnico experto como gestor, pierde a un técnico experto, y no gana un gestor".
Nuevo escenario
Uno de los ingredientes principales es la falta de comportamientos de los líderes empresariales, enfocados a las personas. Se trata de un contexto en el que el personal y las prioridades han cambiado de forma significativa.
"Las fuerzas de trabajo son más diversas que nunca, la salud mental es una de las prioridades fundamentales. Muchas personas no están bien por estrés y ansiedad, y eso fuerza el absentismo. Hay, también, un cambio en las expectativas y ahora la conciliación y el reconocimiento profesional son más importantes que el propio hecho de ganar dinero", recalca.
Imagen de archivo de una mujer sufriendo estrés / EUROPA PRESS
De hecho, en la línea de la conciliación, el experto arroja las cifras de un estudio elaborado por Michael Page en 2024, que revela que "el 57% de los trabajadores renunciaría a un ascenso, si el nuevo puesto implicara sacrificar el equilibrio entre la vida laboral y personal".
Por qué la gente se va
"Hay un auge de los trabajadores del conocimiento: tareas de naturaleza cognitiva, pero no rutinaria. se trata de trabajos muy complejos", explica. Añade un segundo factor, la productividad, de la cual explica que "no se puede medir de la misma manera una idea que lo producido en una cadena".
Un segundo elemento son las aspiraciones personales. "En el momento que los trabajadores dejan de aprender, cambian de trabajo", sentencia. En el caso particular de España, se le ha de sumar una pérdida paulatina de poder adquisitivo, la cual conlleva a menos compromisos a largo plazo. En cuanto a las personas jóvenes, estas "le prestan mucha atención al impacto positivo de su empresa y de su puesto de trabajo", añade.
Futuro
García habla de los escenarios de futuro, al respecto del talento en el sector industrial. Habla de equipos con más edad, ante el retraso de la edad de jubilación. También se centra en la competencia que vendrá del exterior o los riesgos globales como los medioambientales, geopolíticos o tecnológicos.
No obstante, de todo el escenario complicado, hay un elemento el cual destaca, y es precisamente, lo que puede pasar con la tecnología.
Incorporación de la Inteligencia Artificial en la industria del entretenimiento
Cambio tecnológico
"Se trata de un cambio sin precedentes. Es la automatización de la automatización. La invención de lo que inventa. Supone un ahorro de tiempo y mejora el output", señala. Con el auge de la inteligencia artificial (IA), García explica que "todavía" no se ve un impacto directo de esta en los puestos de trabajo. No obstante, recalca que "ha variado la demanda en ciertos conocimientos y habilidades".
Ante la falta de talento y el cambio tecnológico, el experto recalca tres medidas principales que ya están tomando las empresas. La primera de ellas, la inversión en aprendizaje y formación en el trabajo. La segunda, automatizar todavía más ciertos procesos. La tercera, reposicionamientos del personal existente.
"La IA es una herramienta muy accesible, y esto implica una tecnología igualadora entre empresas. Todas van a tener lo mismo, y en lo que se van a tener que diferenciar es, precisamente, en las personas", concluye.