El precio de la vivienda seguirá volverá a moderar su ritmo de crecimiento en 2024 aunque de forma menos acusada de lo esperado, toda vez que el comportamiento de la economía y la previsión de rebajas de los tipos de interés mantendrán viva la demanda frente a una oferta de unidades nuevas insuficiente para atenderla.
Esta es la radiografía del mercado inmobiliario residencial en España que dibuja Caixabank Research en su último informe sobre el sector, en el que constata un incremento del 3,9% en los precios a lo largo de 2023.
Insuficiente oferta
Frente a esta proporción la entidad prevé un ritmo de crecimiento más de un punto inferior en el conjunto del ejercicio iniciado hace dos meses. Concretamente, la estimación apunta a un incremento del 2,7%, no obstante muy superior al 1,1% previsto inicialmente.
La principal causa de que se mantenga la tensión de precios en el segmento residencial es el ritmo sostenido de operaciones de compraventa que se espera, en torno a 550.000 unidades tanto en 2024 como en 2025, mientras que los visados de obra nueva fluctuarán entre 115.000 que se esperan este año y los 125.000 para el próximo.
Ritmo sostenido de compraventas
Es decir que la oferta sigue siendo notablemente escasa para absorber una demanda que sigue en proceso de desaceleración, aunque a un ritmo más pausado de lo esperado.
Así, los cálculos anteriores de Caixabank Research apuntaba a una cifra de operaciones de compraventa ligeramente superiores al medio millón, lo que supondrá un descenso del 13,5% respecto a 2023. Las cifras actualizadas aminoran el ritmo de bajada al al 6,7%.