La justicia ha anulado la inhabilitación vitalicia y la multa a los hermanos Higini y Ramon Cierco que, en 2020, les impuso la Autoridad Financiera de Andorra (AFA) al entender que cometieron graves irregularidades en la gestión de la Banca Privada d'Andorra (BPA). Ahora, los tribunales han detectado un defecto de forma en aquellas sanciones y las ha dejado en papel mojado.
En aquel momento, la AFA consideró que los Cierco (socios mayoritarios de BPA), así como Joan Pau Miquel, ex consejero delegado, cometieron dos infracciones muy graves y otras dos, graves por el incumplimiento de la normativa disciplinaria del sistema financiero, por lo que los inhabilitó de por vida y les impuso una multa de 224.000 euros a cada uno.
No recibieron comunicación
Sin embargo, los Cierco recurrieron al entender que la AFA en ningún caso les comunicó la apertura de un expediente, aunque tenía la obligación de hacerlo e identificar a los presuntos autores de la infracción. Este error de forma ha sido suficiente para que la justicia anule la sanción y la inhabilitación.
La misma AFA ha reconocido que se trata de un defecto inicial y, aunque el fallo judicial no entra a valorar si los Cierco cometieron o no irregularidades, sí menciona que, al tratarse de un procedimiento sancionador que puede derivar en grandes sanciones, la comunicación a los responsables es requisito sine qua non para que pueda prosperar el castigo.