Agbar y los Mossos d'Esquadra unen fuerzas y acuerdan un plan de prevención de seguridad para evitar el robo de cobre de las plantas de tratamiento de aguas, especialmente de las depuradoras. El acuerdo llega en el marco de la sequía que afecta a Cataluña, ya que el robo de cobre en este contexto podría suponer el cierre de las plantas y agravar, de manera significativa, la situación de escasez de recursos hídricos.
En este sentido, desde la gestora de agua aseguran que la paralización de una depuradora como la que se encuentra en la comarca del Baix Llobregat afectaría a la producción de agua regenerada, que supone el 25% del recurso que se consume en el Área Metropolitana de Barcelona. Concretamente, la que proviene de la depuradora del Baix Llobregat se distribuye, después de su tratamiento, a casi tres millones de personas.
Más presencia policial y atención prioritaria
Por ello, con el objetivo de mantener estas infraestructuras a salvo de los ladrones y garantizar el buen funcionamiento de las depuradoras, Agbar ha llegado a un acuerdo con la policía catalana para aumentar la presencia de agentes uniformados en los aledaños de las plantas más críticas y actuar de manera preventiva ante la posible irrupción de ladrones de cobre.
Además, el acuerdo también prevé que en caso de que salten las alarmas, los Mossos recibirán un aviso de Agbar el cual deberán atender de forma prioritaria para proteger estas infraestructuras y garantizar la continuidad del servicio.
Con todo, cabe recordar que el Código Penal sanciona con penas de entre dos y cinco años de prisión a las personas que roben cables, equipos o componentes de infraestructuras destinadas a la prestación de servicios de interés general.