Los accionistas de Endesa verán rebajada su expectativa de ingresos por los dividendos comprometidos por la compañía energética para los próximos años. En el marco de la actualización de su plan estratégico, la compañía ha modificado su política de retribución al accionista de manera que disminuye a un euro por acción el dividendo mínimo para 2024 y 2025, ejercicios en los estaban previstas cifras de 1,2 y 1,4 euros por título respectivamente.
De esta forma, la empresa controlada por el gigante italiano Enel, participado por el Estado transalpino, repartirá con cargo a las cuentas de los dos próximos años algo más de 2.100 millones de euros entre sus socios, aproximadamente un 25% menos de lo comprometido con la anterior estrategia.
Impacto del laudo
En este punto ha tenido impacto el resultado del proceso de arbitraje conocido en las últimas horas, que obliga a Endesa al pago de unos 530 millones de euros a un proveedor de gas qatarí como resultado del proceso abierto en su día en el tribunal de arbitraje de la Cámara de Comercio Internacional acerca de la revisión de precios por las subidas en el mercado de materias primas.
En un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Endesa recuerda que su estrategia económico-financiera incluye maximizar la retribución al accionista pero siempre en función de los beneficios y también del mantenimiento de la estructura.
Plan continuista
En este sentido, la compañía sí mantiene la política de destinar el 70% del resultado neto de cada año a la distribución de dividendos.
La revisión del plan estratégico de la energética no modifica en gran medida los parámetros establecidos en el original y mantiene en líneas generales las inversiones previstas, con un volumen de 8.900 millones, como ya adelantó el día anterior Enel en su Capital Markets Day.
Hasta 2.300 millones de beneficio
Como principales objetivos para 2026, Endesa se fija alcanzar un resultado bruto de explotación (Ebitda) de entre 5.600 y 5.900 millones de euros y un beneficio ordinario neto de entre 2.200 y 2.300 millones de euros.
Mientras, la compañía prevé que la deuda financiera neta se sitúe en un rango de entre 8.000 y 9.000 millones.
Reacción negativa en bolsa
La respuesta de los inversores a la actualización del plan ha sido negativa. Una hora después de la apertura del mercado, las acciones de Endesa registran descensos próximos al 2,5%, lo que le lleva a ser el valor con peor comportamiento del Ibex 35.
La trayectoria bajista de Endesa al inicio de la sesión contrasta con el tono plano que las principales bolsas europeas muestran este jueves. En lo que va de año, los títulos de la energética se han revalorizado algo más de un 6%.