El presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, ha vuelto a cargar duramente contra los reguladores del sector, tanto en España como en Europa, a los que ha acusado de mantener una normativa obsoleta y que impide a las compañías competir en el mercado con todas sus armas.
"Se empeñan en regular un mundo que ya no existe", ha apuntado el ejecutivo, en referencia a que los múltiples avances tecnológicos que se han producido en los últimos años no han tenido la correspondiente respuesta en el marco normativo que, además, considera que fuerza a las empresas a estar demasiado encorsetadas.
Desregulación
Durante la presentación ante los analistas del plan estratégico a tres años que la compañía ha dado a conocer poco después del mediodía de este miércoles, Álvarez-Pallete ha dejado claro que su única petición se basa en que "se nos desregule para poder competir en igualdad de condiciones. No se entiende que se nos regule con normas que vienen del siglo pasado".
A preguntas de los analistas, el presidente de la operadora ha mencionado, a modo de ejemplo, que Telefónica se mantiene a efectos regulatorios bajo la condición de operador dominante en el segmento de la TV de pago, "mientras que a jugadores que se han incorporado hace ya años como Netflix, HBO o Amazon Prime ni siquiera se les mide".
A vueltas con la fusión
También ha incidido en lo absurdo que resulta que se tengan en cuenta elementos como el cable de cobre cuando Telefónica le dirá adiós antes de que finalice el próximo año.
Álvarez-Pallete se ha mostrado igualmente contrariado por el hecho de que la operación de fusión entre Orange y MasMóvil siga aún pendiente de las preceptivas autorizaciones de la Comisión Europea cuando ha transcurrido ya año y medio desde que ambas compañías lo anunciaron.
Competidores más fuertes
Como ha hecho en otras ocasiones, ha señalado que la creación de un competidor más fuerte supone algo positivo para Telefónica y ha reiterado su convencimiento de que los reguladores no deberían forzar a las empresas involucradas en la fusión a deshacerse de activos.
El máximo responsable de Telefónica también se ha referido como un factor positivo para el sector los planes ambiciosos que Zegona ha hecho públicos tras adquirir el negocio de Vodafone en España.