Lluvia de yates en Vilanova i la Geltrú (Barcelona) para la regata preliminar de la Copa América de vela, que arranca mañana en el puerto del Garraf. Hasta cinco grandes esloras han atracado ya en el puerto deportivo de Marina Vilanova para seguir de cerca la carrera amistosa que zarpa en pocas horas, con los cinco equipos aspirantes al título y el Emirates Team New Zealand, defensor de la copa.
Lo han explicado fuentes del sector, que han explicado que "es inhabitual" la concentración de yates de gran eslora en Marina Vilanova, pese a que este puerto se está poniendo de moda en Cataluña, como detalló este medio. Hoy, sin embargo, hay presencia de grandes naves en ocasión de la regata previa de la Copa América, que se celebrará de forma oficial en Barcelona en agosto de 2024.
La estrella: el Ilona
De los grandes esloras atracados en el puerto deportivo, el más lujoso es el My Ilona o Ilona, un coloso de 82 metros de eslora y con un precio de construcción de 100 millones de dólares (93 millones de euros al cambio) que perteneció al multimillonario australiano Frank Lowy.
Desde el sector recuerdan que el activo "estuvo a la venta", pero la operación no se consumó, por lo que sigue en manos privadas. Ello con sus credenciales, que son espectaculares: cuatro vueltas al mundo en el zurrón, seis cabinas-suite con capacidad para 20 personas y un cine interior para 14 espectadores, entre otros.
El más nuevo: el Infinite Jest
El más nuevo en Vilanova es el Infinite Jest, un titán de 75 metros de eslora que entregó el astillero turco Turquoise Yatchs este mismo año.
Con capacidad para 14 viajeros, el Jest precisa de una tripulación de 20 personas y mueve a todos ello a una velocidad máxima de 17 nudos por hora. Eso sí, previo pago de 60 millones de dólares (55 millones de euros).
Un 'vintage' finlandés
Un poco más lento es el Jester, que también ha atracado en Marina Vilanova para seguir a los seis equipos participantes. Este buque finlandés (lo firma Laivateollisuus) mide 70 metros de eslora, que mueve a un máximo de 15 nudos por hora.
Botado en 1972, el Jester es considerado el 318º yate más lujoso del mundo, con una configuración que recuerda a la de un pesquero tradicional.
El del dueño de Ineos
Junto a ellos se encuentra el Hampshire, propiedad de Andrew Currie, dueño del grupo químico Ineos Group Limited, con sede en Londres (Reino Unido). El laboratorio británico patrocina, de hecho, el challenger de este país en la Copa de 2024 en Barcelona. Como el resto de escuadras, se estrenará mañana en Vilanova.
Para no perder detalle, Currie ha traído hasta Vilanova el Hampshire, con 66 metros de eslora y un precio que ronda los 90 millones de euros. Lo firma el astillero holandés Feadship, que lo botó en 2016.
El 'pequeño'
Más discreto, también ha recalado en el puerto del Garraf el Genesia, de 50 metros de eslora pero amplias prestaciones, pues pueden relajarse en él 10 personas en cinco cabinas.
Cabe destacar que el Genesia era un buque de servicios antes de ser transformado en la nave de lujo que es hoy, y que los aficionados de la Copa América pueden otear desde la distancia.
Si no entras, fuera
Desde el sector náutico se recuerda que la propia configuración de la Copa América de vela impide que se amontonen decenas de yates de espectadores vip. "O la sigues desde alta mar a mucha distancia, acercándote con un barco auxiliar, pues no te dejan entrar en el puerto, o la sigues desde tierra con binoculares", detallan.
Ello ha prevenido a algunas celebrities de venir a Vilanova, apostillan, recordando que "el espectáculo se sigue mejor por televisión". En todo caso, se espera mucho movimiento en la localidad costera, que ha centralizado la zona vip en la discoteca-beach club La Daurada.