Ethereum tiene una rica historia, en la que se han producido avances y retrocesos significativos. En particular, la red pasó del modelo de prueba de trabajo (PoW) al mecanismo de prueba de participación (PoS) a mediados de septiembre de 2022. Se espera que este cambio reduzca la huella energética, aumente la escalabilidad y acelere los tiempos de transacción.
Esta evolución se denominó "Ethereum 2.0", un término amplio que englobaba la transformación de Ethereum en una red más potente y accesible. La comunidad blockchain consideró esta actualización como un paso necesario y esperado en el desarrollo continuo de Ethereum.
Para distinguir entre ambos, es fundamental conocer bien las definiciones básicas de cada uno de ellos.
Ethereum
Es la red vanguardista que aprovecha la tecnología blockchain de forma descentralizada. Su criptomoneda nativa, Ether (ETH), goza de un amplio reconocimiento. Ether es un token destinado a financiar el mantenimiento de la cadena de bloques, pero también puede utilizarse para pagar productos y servicios tangibles. La versatilidad de la red permite a cualquiera desarrollar cualquier tecnología digital segura.
Ethereum presume de su escalabilidad, programabilidad, seguridad y descentralización, lo que la convierte en la blockchain de referencia para soluciones tecnológicas empresariales y dirigidas por desarrolladores que están impulsando el cambio en muchos sectores, incluyendo nuestras vidas cotidianas.
Los contratos inteligentes son una característica esencial de las aplicaciones descentralizadas, y Ethereum los admite de forma nativa. Numerosas aplicaciones financieras descentralizadas (DeFi) se basan en contratos inteligentes y en la tecnología Ethereum.
Ethereum 2.0
El término "Ethereum 2.0" se utiliza habitualmente para describir las mejoras introducidas en la cadena de bloques Ethereum para resolver sus problemas técnicos. Sin embargo, no es un nombre oficial reconocido por los desarrolladores de Ethereum. En su lugar, la Fundación Ethereum prefiere utilizar "Ethereum" para referirse a la blockchain actualizada, mientras que la capa de consenso se denomina "ETH 2" y la capa de ejecución "ETH 1".
El desarrollo de la versión 2.0 ha estado en marcha durante varios años antes de que se implementara esta actualización. El lanzamiento oficial de la cadena Beacon en diciembre de 2020 fue el primer paso en el proceso de actualización, permitiendo a los usuarios stakear su Ether y participar en los procesos de consenso y validando la red mientras recibían recompensas en ETH.
Las tres principales diferencias
A medida que aumenta la popularidad de las criptomonedas, se presta más atención a su infraestructura subyacente. Ethereum, la segunda mayor criptomoneda por capitalización bursátil, ha sido objeto de una importante renovación para convertirse en Ethereum 2.0. Esta actualización promete abordar algunos de los problemas más acuciantes a los que se enfrenta la red y mejorar su escalabilidad y seguridad.
Vamos a señalar las diferencias fundamentales entre Ethereum y su versión 2.0.
Modificación del mecanismo de consenso
Tras el abandono de la prueba de trabajo (PoW), que implicaba minar monedas en la red con costosas granjas y equipos de minería, y el paso al mecanismo de prueba de participación (PoS) a finales del año pasado, la cadena de bloques de Ethereum selecciona ahora aleatoriamente a poseedores de ETH para que actúen como validadores. Estos validadores son los responsables de generar el hash del nuevo bloque. Para ser validador, hay que stakear al menos 32 ETH. Los poseedores de cantidades inferiores que deseen participar pueden asociarse con otros en pozos de staking (staking pools).
Para proteger la cadena de bloques del fraude, cualquier validador que sea sorprendido avalando transacciones ilegítimas se enfrentará a una deducción de sus fondos stakeados, un proceso conocido como slash. El PoS no sólo es un enfoque sostenible, sino que también promueve una blockchain más descentralizada en comparación con su predecesora. Los usuarios ya no necesitan invertir en costosas plataformas, lo que abre la posibilidad de que cualquier persona con una cierta cantidad de ETH participe en la minería de nuevos tokens.
Fragmentación o ‘sharding’
Otra mejora significativa de Ethereum 2.0 respecto al Ethereum clásico es la fragmentación (sharding). La fragmentación es una técnica de programación estándar en la que los datos se distribuyen entre varias máquinas, lo que aumenta la velocidad de procesamiento. En el caso de Ethereum, se introdujeron 64 shards para distribuir la carga de trabajo en varias bases de datos. Cada shard es una nueva cadena conectada a la antigua cadena de Ethereum para acceder a los datos registrados previamente. Todos los shards funcionan igual que en la cadena antigua.
La fragmentación resuelve los problemas de escalabilidad de Ethereum. El Ethereum clásico sólo era capaz de gestionar 15 transacciones por segundo, mientras que Ethereum 2.0 puede gestionar hasta 100.000 transacciones por segundo. Para ilustrarlo, imagine la antigua blockchain de Ethereum como una autopista muy transitada con un solo carril. Pero con la reciente actualización, se han añadido 63 nuevos carriles, haciendo que el tráfico fluya más rápido.
La cadena de baliza
En nuestra explicación anterior mencionamos la división de Ethereum 2.0 en 64 cadenas distintas y el proceso de selección de validadores para añadir nuevos bloques de datos a ellas. Sin embargo, es posible que se pregunte cómo se conectan estas cadenas y cómo se eligen los validadores. La respuesta está en la diferencia entre ETH y ETH 2.0. Las 64 cadenas están conectadas a una única blockchain llamada Beacon Chain o Cadena de Baliza. Este componente central controla toda la red y facilita las transacciones en todo el ecosistema.
Una función esencial de la cadena de baliza es seleccionar y controlar al azar al siguiente validador. En caso de comportamiento abusivo, también es responsable de deducir la cantidad stakeada. La selección aleatoria de los validadores garantiza que el sistema se mantenga libre de prejuicios hacia determinados participantes. En resumen, la cadena de baliza actúa como el cerebro de toda la red Ethereum 2.0.
¿Qué cambios podría traer Ethereum 2.0?
La prueba de participación (PoS) consume menos recursos que la prueba de trabajo (PoW), lo que se traduce en una mayor velocidad de transacción y un menor consumo de energía.
Aunque la red procesa procesaba 12 transacciones por segundo en marzo de 2023, los desarrolladores han asegurado una eventual capacidad de 100.000 transacciones por segundo mediante la implementación de actualizaciones, incluyendo Proto-Dnaksharding y Danksharding, que introducen el muestreo de datos distribuidos y potencialmente sustituirán los rollups por "blobs".
En resumen
Recientemente, Ethereum cambió a Proof of Stake (PoS), lo que se considera su más importante evolución. La Fundación Ethereum comparó este cambio con actualizar una nave espacial con un nuevo motor y reforzar el casco para realizar viajes interestelares.
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