El magnate israelí del petróleo Haim Tsuff abrirá un hotel en el centro de Barcelona

El magnate israelí del petróleo Haim Tsuff abrirá un hotel en el corazón de Barcelona. El empresario energético se ha quedado con un pequeño alojamiento de 44 habitaciones en el distrito de Ciutat Vella y lo reabrirá, en su segundo gran proyecto turístico en España tras la inversión en la antigua torre de Correos de Málaga, en la que proyecta un resort vertical de lujo. 

Lo han explicado fuentes del sector, que han indicado que Tsuff, por medio de su sociedad Nitsba Spain, se ha hecho con la licencia del Hotel Cortés, un pequeño y anodino establecimiento de 44 habitaciones y 72 plazas situado en la calle Santa Anna, a pocos centenares de metros de la plaza de Catalunya. 

"Lo reabrirá como propio: Quentin Barcelona"

Crónica Global se ha dirigido a Nitsba, el grupo inmobiliario que opera Tsuff desde Fuengirola (Málaga), pero no ha recibido respuesta. Sí la ha dado uno de los letrados vinculados al proyecto, que se ha limitado a constatar que "se está trabajando para transferir la licencia del antiguo propietario al actual". 

Imagen de una habitación del Hotel Cortés de Barcelona Cedida

Este paso requiere el visto bueno del Ayuntamiento de Barcelona, aunque el permiso hotelero, en vigor, acabará en manos de Nitsba salvo sorpresa. Con esa autorización, la firma del magnate podrá reabrir el hotel y operarlo bajo la marca Quentin Barcelona. 

Tiene licencia y sortea el Peuat

Tsuff puede abrir un nuevo hotel en el corazón de Barcelona, y en Ciutat Vella, un distrito muy congestionado por el turismo, porque el hotel que ha adquirido ya tiene licencia. No es un nuevo permiso: es una transferencia del actual. 

La pidió Implexsel Iberia, que es la firma que operó el Hotel Cortés antes de que dejara de funcionar. La regía el inmobiliario Rafael González Bonilla, que presenta un porfolio de intereses en varios sectores, desde el cátering a la distribución. 

Proyecto en Málaga

Cuando se concrete, el proyecto del empresario Haim Tsuff en Barcelona será su segunda bandera en España. Antes, en 2019, su empresa saltó a la fama al acudir a la subasta del antiguo edificio de la torre de Correos de Málaga y quedársela. 

Pagó 23 millones de euros por el activo, que busca transformar en un hotel premium. Eso sí, la conversión es compleja, pues el edificio tiene uso de equipamiento, no hotelero. Ante ello, la inmobiliaria Nitsba, de Tsuff, debe compensar al Ayuntamiento de Málaga. Es algo para lo que ya han comenzado las negociaciones, como avanzó El Español. 

Inversiones detenidas

En Barcelona, el acaudalado inversor tampoco lo tendrá fácil. Cabe recordar que el Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (Peuat) limita la nuevas aperturas en buena parte del tejido urbano de la capital catalana. De hecho, la zona 1, en la que se encuentran Ciutat Vella y el Eixample, son áreas de decrecimiento: cuando queda inactiva una licencia turística, el ayuntamiento la extingue. 

En este escenario, la nueva inversión hotelera en la capital catalana se ha desplazado a la periferia o se ha centrado en la compraventa de hoteles o incluso cadenas que ya están en funcionamiento. El último, el Mandarín Oriental, que pasó de la cartera de Reig Capital Group a la de la empresa saudí The Olayan Group en julio. 

Magnate del petróleo

Ello cambiará ligeramente si Haim Tsuff consigue abrir su Quentin Barcelona. Antes, este magnate aumentó su patrimonio al tomar posiciones paulatinamente en el sector del petróleo. Es presidente de diversas empresas del ramo, como Jerusalem Oil Exploration Limited (JOEL), que tiene una cabecera cotizada denominada Equital Limited, así como Naphtha Israel Petroleum Corporation e Isramco. 

El magnate israelí Haim Tsuff, que impulsa el Quentin Barcelona Cedida

Tras ello, Tsuff, a menudo escrito Tzuff, se situó en el sector de las infraestructuras de movilidad, estaciones de servicio, gestión de centros comerciales, telecomunicaciones y, también, la hotelería, que pende de JOEL. Su flagship es el Princess Hotel en Eliat, que compró en 2015. Fue el preludio de su llegada a España, donde cuenta con los dos proyectos citados, ambos sin empezar.