Las siete fundaciones especiales catalanas, nacidas en 2013 tras la reconversión de las antiguas cajas de ahorro, han destinado 584 millones de euros en inversión social durante la última década en la comunidad.
Pese a tratarse de una cantidad importante, queda lejos de la aportación de la Fundación La Caixa, que no forma parte de este colectivo. En 2023, la entidad presidida por Isidro Fainé cuenta con un presupuesto de 538 millones de euros, que casi iguala al gasto de las fundaciones especiales entre 2013 y 2022.
Gasto por entidad
De acuerdo con los datos publicados por la Consejería de Economía y Hacienda, el gasto por fundación se ha repartido así: el 57% corresponde a la Fundación Catalunya La Pedrera; el 31,7% a la Fundación Antiga Caixa Terrassa; el 5,1% a la Fundación Pinnae; el 2,7% a la Fundación Iluro; el 1,9% a la Fundación 1859 Caixa Sabadell; el 1,1% a la Fundación Antigues Caixes Catalanes, y el 0,5% a la Fundación Antiga Caixa Manlleu.
Además, las siete entidades no solo han mantenido sino que han incrementado anualmente la actividad hecha durante la última década con un crecimiento medio anual del 3,6%. El gasto medio en este periodo se sitúa entorno a los 58,4 millones de euros.
4.321 actuaciones sociales
Por otro lado, las siete fundaciones han realizado un total de 954 proyectos, que se han traducido en 4.321 actuaciones distribuidos por todo el territorio catalán y que han repercutido en 23,5 millones de beneficiarios.
La mayoría de estas actividades se han destinado a la educación y la cultura (69,6%) y la protección del patirmonio natural y el paisaje (21,3%).