El precio de los cerdos vivos en la Llotja Mercolleida ha alcanzado los 91 euros por unidad, cifra que implica un repunte del 71,4% respecto a lo que se pagaba hace tan solo hace un año. En tan solo un trimestre, el coste para adquirir este tipo de animales vivos ha crecido el 27% y ya se pagan a 1,929 euros por kilo.
Este repunte se explica tanto por la escasez de lechones como por las plazas vacías, granjas sin demasiado producto, que existe en toda Europa y no se limita al mercado ilerdense. En otros puntos de España, como en Galicia, el precio de los lechones ha llegado a escalar el 148%, tal y como alertaron los productores locales.
Embutidos y productos cárnicos más caros
Estas cifras ya han encendido las alarmas por los efectos que tendrá sobre la industria cárnica, uno de los principales motores del país. El sector ha avanzado que el precio de todos sus productos tendrá que aumentar para poder cubrir el mayor coste de materia prima.
Los productores consultados señalan que muchos han optado por no trasladar aún al consumidor final el mayor coste de los cerdos. Pero como la tendencia se ha consolidado y va a más, se espera que el incremento se de en el corto plazo y que se vea en todos los productos cárnicos. Incluso en los embutidos, que se espera que se paguen hasta 15 céntimos más caros.
Balón de oxígeno para los ganaderos
Unió de Pagesos pone la nota optimista al nuevo escenario de la producción porcina. Afirma en un comunicado que el incremento “ayuda al ganadero a recuperar las pérdidas de 2022” y que podrán ejecutar las mejoras necesarias en las granjas catalanas.
La mayoría de centros de producción requieren de inversiones para cumplir con las nuevas normativas comunitarias que velan por el bienestar de los animales de engorde.
La cabaña europea retrocede el 6%
Cabe tener en cuenta que Cataluña es una de las principales plazas de producción del continente. A pesar de que las exportaciones de cerdos españoles retrocedieron el 7,9% en el cómputo anual hasta abril, los animales que proceden del territorio son el 55,8% del total. En cuanto a la importación, en los cuatro primeros meses del ejercicio en curso se importaron el 26,6% más de animales que en el mismo periodo del ejercicio anterior.
Todo ello, en una actividad en claro retroceso a nivel europeo. En el último año la cabaña comunitaria se ha reducido el 6% o, lo que es lo mismo, se engordan 7,6 millones de animales menos.