Caixabank abonará este miércoles un dividendo de 0,23076 euros por acción a sus socios con cargo a los resultados del pasado año, lo que reportará a la Fundación Bancaria La Caixa ingresos brutos de unos 557 millones de euros, en virtud de su condición de primer accionista de la entidad financiera.
La retribución mejora en un 58% la percibida el pasado ejercicio y en el caso de la Fundación, que controla algo más de un 32% del capital, servirá para financiar buena parte de su obra social, en un año en el que el presupuesto de la institución ha alcanzado un máximo histórico, 538 millones de euros.
300 millones para el Estado
Las arcas del Estado también se verán positivamente impactadas por el reparto del dividendo, del que le corresponde un pago de unos 300 millones de euros, gracias a su participación del 17,2%.
En total, el banco que preside José Ignacio Goirigolzarri destinará a dividendos casi 1.730 millones de euros, un 55% del beneficio neto obtenido en 2022, en línea con la estrategia aprobada por el consejo de administración de repartir entre sus accionistas entre el 50% y el 60% del resultado, que también se aplicará en 2023.
Objetivos
En los últimos cinco años, la Fundación La Caixa ha ingresado 1.550 millones de euros en concepto de dividendos del banco.
La institución tiene como uno de sus principales objetivos promover acciones de apoyo a los colectivos más desfavorecidos para que tengan las mismas oportunidades y fomentar así el desarrollo de una sociedad más justa.