Banco Sabadell no volverá a tener su sede en Cataluña, al menos en el corto y medio plazo. De hecho, el planteamiento de un hipotético retorno ni siquiera se contempla como posibilidad por parte del consejo de administración de la entidad, que mantiene que no se dan las condiciones para, al menos, valorarlo. 

“El posible regreso ni siquiera está encima de la mesa”, ha señalado el presidente del banco, Josep Oliu, cinco años y medio después de que el órgano de gobierno en el que, por entonces, actuaba como primer ejecutivo decretara el traslado de la sede social a su ubicación actual en Alicante, debido a los acontecimientos relacionados con el procés.

Igual que hace un año

En un encuentro con la prensa, previo a la junta de accionistas de este jueves, y de forma distendida, el veterano banquero ha recordado con pulcra exactitud las palabras que pronunció hace un año y en el mismo escenario: “No sé lo que tiene que ocurrir para que volvamos a Cataluña… pero no ha ocurrido”.

“Un año después, seguimos igual y, por lo tanto, ni lo contemplamos”, ha señalado Oliu, entre risas por la coincidencia de la frase.

Desarrollar sus negocios

Preguntado por la situación política en Cataluña, el presidente del Sabadell también ha aprovechado para bromear, al indicar que el sentido de la interrogante era el nombre del próximo alcalde de Barcelona, dada la cercanía de las elecciones municipales del próximo 28 de mayo. 

Ya más en serio, Oliu ha apuntado que lo único que pretende el ciudadano en Cataluña es poder llevar adelante sus negocios en paz y sin sobresaltos, “para lo que siempre podrá contar con nosotros”.

Reelección

Entre los puntos que se someterán a la votación de los accionistas en la asamblea de este jueves se encuentra la reelección del propio Oliu como miembro del consejo de administración durante cuatro años más. 

Pese a que su cargo ya no tiene carácter ejecutivo, el dirigente ha señalado que su compromiso con la entidad se mantiene intacto y que, aunque no se ha planteado metas concretas, su cometido será “ayudar todo lo que pueda al equipo del consejero delegado, César González-Bueno, y aportar mi experiencia, que no es poca”.