Caixabank eleva un 29,7% su beneficio y repartirá un 55% a sus accionistas

Caixabank concluyó el año 2022 con un beneficio neto de 3.145 millones de euros, lo que supone un incremento del 29,7% en relación con el resultado proforma obtenido en 2021, año en el que se hizo efectiva la fusión con Bankia, a efectos mercantiles, al cierre del primer trimestre. 

Los resultados de la entidad se han basado en un incremento del 5,8% en los ingresos de la actividad bancaria, hasta alcanzar 11.997 millones de euros, gracias a la positiva evolución del margen de intereses, que aumentó un 7,7%, en parte por el efecto de la subida de los tipos.

Mínimos históricos de morosidad

El margen de explotación se incrementó en un 19,8%, como consecuencia de la evolución positiva del margen bruto (+5,5%) y el recorte de los gastos en un 5,6%, un capítulo en el que han tenido un considerable peso las sinergias derivadas de la integración de Bankia.

La entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri logró estas cifras con una reducción de la tasa de morosidad hasta el 2,7%, lo que supone un mínimo histórico para Caixabank. La ratio de capital CET1 fully loaded mejoró hasta el 12,8%. 

Política de dividendos extendida

Además, el consejo de administración de la entidad aprobó este jueves el abono de un dividendo de 0,23 euros por acción con cargo a estos resultados, con lo que el porcentaje de beneficios destinado a la remuneración del accionista (‘pay-out’) asciende al 55%, en línea con la política del banco de repartir entre un 50% y un 60% del resultado.

Una estrategia que se mantendrá con vistas al ejercicio que acaba de comenzar, según determinó también el órgano de gobierno de Caixabank, lo que le sitúa en línea de cumplir la meta de repartir entre sus socios hasta 9.000 millones contemplada en el plan estratégico.

Rentabilidad próxima al 10%

Caixabank alcanzó una rentabilidad sobre activos tangibles del 9,8% al cierre del ejercicio 2022. El plan a tres años aprobado durante la pasada primavera contempla un objetivo del 12% en 2024.

El banco destaca en un comunicado remitido a los medios la notable actividad comercial que ha llevado a cabo durante el ejercicio, que le ha permitido cumplir con sus metas financieras pese al contexto complicado en el que ha tenido que actuar, especialmente como consecuencia de la guerra en Ucrania, de cuyo inicio se cumplirá próximamente un año.

Menores ingresos por dividendos

Si se incluyen los extraordinarios derivados de la fusión con Bankia, el beneficio de Caixabank desciende un 39,8%, toda vez que en los 5.226 millones de euros que reportó como resultado contable en 2021 estaban incluidos 4.300 millones en concepto de fondo de comercio negativo y otros efectos de la operación.

Los ingresos obtenidos por dividendos de las participadas han descendido un 15%, hasta 163 millones de euros, y han procedido de Telefónica y BFA. Los resultados atribuidos por el método de participación han descendido un 39%, principalmente como consecuencia de la salida del perímetro de la entidad austriaca Erste Group Bank. 

Buena acogida en bolsa

El impacto de los resultados en bolsa ha sido notablemente positivo, como ha sucedido con la mayoría de las entidades financieras que han dado a conocer sus cuentas anuales en estos días. En los primeros minutos de la sesión de este viernes, las acciones de Caixabank repuntan algo más de un 3%, hasta el entorno de 4,1 euros.

De este modo, la capitalización bursátil del banco se sitúa en 30.760 millones de euros, lo que el consolida como el quinto mayor valor del Ibex 35. Desde que presentara su plan estratégico, a mediados del pasado mes de mayo, las acciones se han anotado una subida del 41%.