El sector de la construcción ha celebrado el acuerdo presupuestario alcanzado entre el Govern y el PSC. La Cámara de Contratistas de Obras de Cataluña ha celebrado el pacto, que "incluye las tres grandes infraestructuras", en referencia a la ampliación del aeropuerto El Prat, la promoción del complejo Hard Rock en Tarragona y el despliegue del Cuarto Cinturón.
Aunque el acuerdo es ambiguo acerca de los proyectos para el aeropuerto y el Hard Rock, el presidente de la cámara, Lluís Moreno, ha asegurado que republicanos y socialistas simplemente han "maquillado el nombre" que le dan a estas iniciativas. En una rueda de prensa, ha recordado que el acuerdo habla de "fomentar que el aeropuerto gane capacidad". "Veremos qué quiere decir esto, pero la única forma de ganar capacidad es alargar las pistas o hacer una nueva. No deja de ser una ampliación", ha indicado el representante.
Salvador Illa (i) y la portavoz del PSC Alícia Romero (d), escuchan a Pere Aragonès en el Parlament hablando sobre los presupuestos / EFE
ERC, PSC y comunes
"Intentaremos adaptarnos al argot del Govern y estudiaremos la mejor manera de hacerlo", ha subrayado Moreno. Con respecto al Cuarto Cinturón, el directivo ha recordado que "sí se había fijado como pacto previo" y en cuanto al Hard Rock, ha destacado que "parece que se ha desbloqueado la futura inversión lúdica en Tarragona", lo cual también ha aplaudido.
La cámara ya reclamó tanto al PSC y a ERC que cediesen en sus exigencias para poder alcanzar un acuerdo para los presupuestos catalanes de 2023. Una petición que da por satisfecha con la fórmula consensuada por ambos grupos, ya que permite desbloquear el trámite administrativo de los proyectos por parte de la Generalitat sin perder el apoyo de los comunes al no destinarl ni un euro de las arcas autonómicas: la financiación del Cuarto Cinturón depende del Estado, la del aeropuerto, de Aena, y el Hard Rock cuenta con inversión privada.
Lluís Moreno, presidente de la Cámara de Contratistas de Obras de Cataluña (CCOC) / EP
Fiebre constructora
Moreno ha hecho estas declaraciones en la presentación del Informe de licitación pública de obras y servicios que se ha dado a conocer esta mañana la sede de la Cámara de Contratistas de Obras de Cataluña. Uno de los dtos que arroja es que la licitación de obra pública en Cataluña se disparó un 34% en 2022. Los principales motivos detrás de este aumento son el acercamiento del ciclo electoral, la llegada de fondos europeos Next Generation y los acuerdos marco.
A lo largo del año, la inversión en construcción por parte de las Administraciones alcazó los 3.964,5 millones de euros. Otra de las conclusiones es que el encarecimiento de la construcción ha llevado a muchas empresas a no presentarse a los concursos: han quedado desiertas 573 obras, que ascienden a un importe de 166,3 millones de euros.
Una obra pública a medio construir, en una imagen de archivo / EP
Quiebras y obras desiertas
El presidente de la cámara, ha reclamado "que se actualicen las licitaciones a los precios de los mercados" para evitar concursos de acreedores y problemas de obras desiertas. Ha alertado que la construcción es el sector "que más concursos y disoluciones" está sufriendo: 586 sociedades se han extinguido.
Las quiebras también están demorando las obras ya adjudicadas. "En el marco normativo actual, la Administración licitante tiene un problema serio con las obras en curso cuando la empresa entra en concurso", ha explicado el representante, que ha añadido que "descontratar una obra es un procedimiento burocrático muy complicado" y que esta situación puede demorar los proyectos "uno o dos años".