La Cámara de Comercio de España-Estados Unidos ha galardonado en Nueva York al presidente ejecutivo de Damm Demetrio Carceller “por haber impulsado la transformación dentro de las empresas que dirige y convertirlas en líderes de sus respectivos sectores”.
El reconocimiento Líder Empresarial del Año, que se entrega anualmente en la Gran Manzana, premia a los ejecutivos españoles distinguidos por su labor. La Cámara ha tenido en cuenta que Carceller, en el tiempo que lleva al frente de Damm, haya multiplicado la plantilla por cinco y haya liderado la expansión internacional del grupo, hasta alcanzar el 30% de estas operaciones el total de la actividad del grupo.
Referentes a nivel internacional
Carceller ha logrado convertir en referentes a Damm en el sector alimentario y de bebidas y a DISA en el de distribución de carburantes. En Estados Unidos, la primera tiene una importante presencia, sobre todo en Miami a través de la conocida marca de sándwiches Rodilla y que ha tenido mucho éxito especialmente entre el público latino.
También tiene presencia la marca Damm, si bien como el propio Carceller explicó, la penetración de las cervezas del grupo en el mercado americano es más lenta debido a la enorme competencia.
Se formó en EEUU
El empresario ha recibido el galardón en una cena de gala a la que han asistido unos 200 invitados del mundo empresarial y diplomático, y ha sido el exembajador estadounidense en España Alan Solomont, en su calidad de presidente del Consejo de Administración, quien ha entregado el galardón a Carceller.
En su discurso de recepción del premio, Carceller ha recordado emocionado sus años de estudiante en la Universidad de Duke, en Carolina del Norte, y ha expresado que los valores que aprendió le marcaron posteriormente como empresario. Además, ha puesto en valor “el hambre de transformar e innovar” de los estadounidenses, lo que simboliza, para él, "una carta de amor a Estados Unidos". "Es una pena que España y Estados Unidos solo seamos amigos, cuando podríamos ser los mejores amigos", ha expresado. “Ambas somos culturas creativas, abiertas y extrovertidas, y a menudo espontáneas. Tenemos suerte, ya que esta vivacidad que compartimos es más necesaria ahora que nunca", ha concluido Carceller.