El Consorci de Girona ha denunciado al menos dos graves anomalías en el contrato de transporte sanitario de Aragón, que tiene un presupuesto de 127 millones de euros. La transportista catalana, por medio de la cual concursan exdirectivos catalanes de Acciona, ha pedido anular la preadjudicación a la andaluza Ambulancias Tenorio y excluir a ésta.
Lo razona el Consorci en un recurso de 20 páginas enviado al Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón (TACPA), texto en el que alerta de que Tenorio presentó tarde un plan de igualdad, un requisito obligatorio para se contratista de la administración pública, y que presentó un aval indebido al Gobierno aragonés. Ello son motivos para anular el acuerdo de adjudicación y para excluir a la andaluza, agrega el recurrente.
Retraso en la adjudicación
Pero es que hay más. Los ex altos mandos de Acciona argumentan en su escrito que el Servicio Aragonés de Salud ha incurrido en un retraso no subsanable, pues la normativa de contratación exige que se haya cinco días hábiles después de la recepción de la documentación, pero lo hizo más tarde.
Asimismo, cuando el Salud propuso adjudicar a Tenorio, ésta estaba en prohibición de contratar, pues carecía de un plan de igualdad pactado con la parte social. Lo entró, como avanzó este medio, 23 días tarde.
Pulso por el transporte sanitario
El recurso del Consorci de Girona y los exdirectivos de Acciona al TACPA se suma a los que han presentado los sindicatos de la industria de transporte de pacientes, que apuntan a irregularidades en el mismo sentido. De hecho, en algunos de los escritos se alerta de posible prevaricación si Tenorio se lleva el contrato de 127 millones.
Lo que subyace es el pulso por el sector de las ambulancias urgentes tras la retirada de Acciona del sector. El conglomerado se suma así a otras cotizadas que se están retirando del healthcare por la intensa necesidad de personal y la exigua aportación al beneficio bruto que tienen estos negocios.
Huelga a la vista
Sea como fuere, la llegada de Tenorio a Aragón ha encajado rechazo por otro lado. Es el de la parte social, que ha visto como la andaluza se negaba a suscribir las mejoras del nuevo convenio del sector.
Ante ello y la negativa de la enseña familiar de negociar avances, los sindicatos han preanunciado una huelga.