El chatarrero que se ha hecho con las acciones del hotel Fairmont Juan Carlos I de Barcelona prepara el convenio con los acreedores para reabrir el alojamiento. Pablo Usandizaga, abogado especializado en activos en problemas, está diseñando un acuerdo con los tenedores de obligaciones que permite retomar la actividad del único cinco estrellas de la Ciudad Condal que permanece cerrado desde la pandemia.
Lo explican fuentes de sector alojativo, que detallan que Usandizaga lanzará el proceso de consultas del concurso de acreedores a partir de la próxima semana. El proceso de insolvencia ha cogido velocidad de crucero con la reapertura del resort en el horizonte, insisten las mismas fuentes.
Preocupación por la plantilla
Mientras Usandizaga prepara una entente con los acreedores, crece la inquietud por la plantilla del Fairmont, unos cerca de 300 trabajadores con gran preparación que llevan casi tres años en blanco, sufriendo la inactividad de la ciudad alojativa y de congresos de la capital catalana.
El personal aguarda a la reapertura del activo para poder desempeñar su actividad tras casi tres ejercicios parados.
La deuda, vendida
El periodo en blanco ha tenido lugar por la fase dura de la pandemia del coronavirus, primero, y por el azaroso proceso de venta, después. Finalmente, ha sido Tyrus Capital quien se ha hecho con la propiedad del negocio comprando la deuda con la intermediación del chatarrero.
Eso sí, el vehículo inversor tendrá que hacer frente al fin de la concesión administrativa, que vence en 2039. A partir de aquella fecha, el Fairmont no podrá ocupar legalmente la parcela de la que disfruta en el extremo sur de la avenida Diagonal.