Barcelona encara la legalización del edificio de La Rotonda, que rehabilitó Núñez y Navarro (NyN), dando así la victoria a la constructora de la familia Núñez tras años de pugna. El ayuntamiento ha publicado la aprobación inicial del plan urbanístico que devuelve a la ley la reforma que acometió la firma del ladrillo en 2016, pero que anuló el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC). 

Según consigna hoy el Boletín Oficial de la Provincia de Barcelona (BOPB) [ver enlace], la comisión de gobierno ha dado luz verde al Plan Especial Integral de La Rotonda, el instrumento urbanístico que legaliza la intervención que hizo Núñez y que estrenó seis años atrás como edificio corporativo con las nuevas oficinas de Accenture como primer cliente, como adelantó este medio. 

El TSJC lo tumbó

Pero en 2018 hubo un traspié, y es que el TSJC anuló el planeamiento anterior aduciendo que La Rotonda es un buen protegido con categoría B, y que cualquier modificación se tenía que acometer por medio de un PEI y no un plan de mejora urbana (PMU). 

Asimismo, se cuestionó la volumetría final de la rehabilitación de NyN, por cuanto la constructora colocó una planta más de las permitidas, aunque no alineada con la fachada --que goza de protección--, sino entrada hacia el interior. Ahora, el PEI, consolida esa nueva falsa planta, permitiendo a la firma consolidar la nueva altura del monumento. 

Batalla desde 2008

La nueva herramienta de planeamiento, que es recurrible a los tribunales, pone fin a década y media de batalla administrativa y judicial. En 2008, el ayuntamiento aprobó el plan de La Rotonda. Tres años después, en 2011, asignó la licencia de obras. Los trabajos de rehabilitación terminaron cinco años después, en 2016. 

Pero el TSJC anuló el plan inicial del 2018 a iniciativa de los vecinos por los citados defectos de forma y la controversia con la nueva altura del inmueble. Ello obligó a hacer un nuevo plan, que naufragó en mayo de 2022 por "deficiencias", informó el ayuntamiento.

El documento que entra hoy en vigor tiene como fin poner fin a contencioso.