La consejera de Economía, Natàlia Mas, ha aprovechado su intervención en las Jornadas Económicas de S'Agaró para reivindicar ante el vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, la ficha bancaria del Instituto Catalán de Finanzas (ICF).
El año pasado, la entidad financiera autonómica presentó esta solicitud al Banco de España como paso previo a su traslado a aprobación del BCE. Pero en marzo, el supervisor español dio carpetazo al expediente de la Generalitat.
Operación abortada
El objetivo de la Generalitat con este movimiento era operar en el sector minorista para captar depósitos como si fueran un banco privado.
Mas ha calificado el ICF de "herramienta del Govern" para favorecer la creación de ocupación y garantizar el "acceso a una financiación más económica". "Hay que seguir hablando con el BCE", ha remarcado la consellera.
Presupuestos de 2023
Por otro lado, la consejera ha sido cuestionada por la tramitación de presupuestos de la Generalitat de 2023, aunque ha señalado que no es el momento de dar detalles "por respeto a las conversaciones" que se mantienen entre el Govern y la oposición.
Únicamente ha reiterado la "plena disposición a debatir" desde el Ejecutivo catalán y ha defendido que los números presentados "permitirían disponer de forma inmediata de 3.000 millones de euros más con respecto al año anterior". Respecto a la fiscalidad, ha asegurado que tampoco puede entrar "en excesivos detalles" y ha abogado por ser "muy prudentes".