Santander considera que aun cuenta con recorrido al alza en lo que se refiere a sus resultados y la rentabilidad, aunque aquéllos caminen hacia cifras récord y ésta haya superado ya el objetivo del banco para el presente ejercicio. 

Una visión optimista que ha expresado el consejero delegado de la entidad, José Antonio Álvarez, en sus últimas semanas en el cargo, antes de dar el relevo da Héctor Grisi a partir del próximo 1 de enero, como se anunció poco antes del verano.

"No vamos a quedarnos ahí"

Tanto en la presentación de los resultados de los nueve primeros meses del año ante los analistas como en la posterior rueda de prensa, Álvarez se ha mostrado tajante a la hora de pronosticar que “la renbtabilidad va a subir, el 13,6% conseguido hasta septiembre no se va a quedar ahí”. 

En el comunicado emitido por el banco para dar cuenta de las cifras trimestrales, Santander asegura que esta ratio de rentabilidad sobre activos tangibles (ROTE) se sitúa “muy por encima” del coste de capital, aunque en este punto el ejecutivo se ha mostrado algo más prudente dado que se trata de una variable con un comportamiento más volátil de lo habitual.

Sin reflejo en bolsa

Álvarez ha explicado que las proyecciones a tres años que elabora el banco a finales de cada ejercicio muestran que las entidad puede seguir incrementando el beneficio próximamente y se mostró convencido de que lo hará bajo la batuta de Grisi. 

No obstante, el consejero delegado admitió que estos logros no se están viendo recompensados por los mercados, que han hecho de Santander el valor financiero del Ibex 35 más penalizado a tres años vistas, con descensos del 30% en la cotización.

"Somos diferentes"

“La evolución de la acción no recoge los resultados, los múltiplos son muy bajos”, ha admitido Álvarez, que considera que los inversores “deberían valorar que Santander es capaz de generar resultados recurrentes crecientes con su actividad”. 

Preguntado por la comparación con el resto de bancos cotizados, que presentan una mejor evolución en el mercado, algunos de forma muy diferencial, Álvarez ha señalado que Santander “no es un banco comparable con el resto de los españoles”, tanto por su diversificación geográfica como por su modelo.  

Impacto relativo de la inflación

En relación con las negociaciones que el sector mantiene con el Gobierno acerca de posibles medidas para paliar el efecto de la inflación y la subida de tipos en los colectivos más vulnerables, el consejero delegado de Santander ha apuntado que la evolución de los precios no ha sido tradicionalmente un factor relevante para observar un incremento de la mososidad. 

“Al principio se nota algo más pero en el momento en que progresivamente se adecuan los salarios la situación vuelve a la normalidad”, ha explicado. En cualquier caso, ha recalcado que el mayor interés de Santander es “que sus clientes puedan pagar”.