El acuciante problema de la sequía en España tiene su fundamento en la falta de definición por parte de las administraciones. Así lo asegura una voz más que autorizada en la materia como es la de Àngel Simón, presidente de Agbar y vicepresidente ejecutivo para España y Latinoamérica de su matriz, Veolia. “Las empresas tenemos la tecnología y la gestión, lo que falta es gobernanza”.
Simón admite que la falta de agua ha sido un problema recurrente en el país, más allá de los efectos del cambio climático, pero asegura que las ciudades no deberían tener problemas de sequía en estos tiempos.
Colaboración público-privada
“La clave está en la reutilización de las aguas; si se hiciera correctamente, el problema dejaría de existir. Pero para eso hace falta institucionalidad, que las administraciones definan objetivos y decidan cómo cumplirlos”, ha apuntado el ejecutivo durante su intervención en un desayuno organizado por la escuela de negocios Esade en Madrid.
La solución es “la participación público-privada, la colaboración entre todos. Porque las empresas que gestionamos el agua en las ciudades somos eficientes, tanto las públicas como las privadas”.
Demasiados reguladores
Simón ha asegurado que en España “jamás deberíamos tener escasez de agua en el uso urbano pero lo cierto es que más del 50% del territorio nacional está por debajo de los niveles convencionales”.
El ejecutivo también ha lamentado que no exista un regulador único, como sucede en los países anglosajones o en algunos de Latinoamérica, como Chile. “Tenemos tantos reguladores como ayuntamientos y así resulta imposible determinar quién lo hace bien y quién no, al no contar con un referente, con un único criterio”.
Sostenibilidad: de opción a obligación
En la misma categoría de problemas y desafíos como la sequía y el cambio climático, Simón ha hecho referencia a la creciente relevancia que ha adquirido la sostenibilidad en el ámbito de la gran empresa, hasta el punto de asegurar que “ya ha dejado de ser una opción para convertirse en una obligación”.
Conocedor de este ámbito, dado que Veolia es la compañía líder mundial en economía circular, Simón ha señalado que la aprobación por parte de la Unión Europea de la taxonomía que define qué actividades son sostenibles y cuáles no hará que este parámetro se haga más habitual en las prácticas de las empresas en los próximos años.
En este sentido, ha recordado que cada vez son más las grandes gestoras de fondos que firman compromisos en este sentido, lo que supone que no invertirán en "compañías que no apliquen criterios de sostenibilidad y de inversión responsable”.