Segundo intento del gobierno municipal de Barcelona, que pilota la alcaldesa Ada Colau, de echar a los cuatro grandes restaurantes y clubes de ocio nocturno que permanecen en el Frente Marítimo de la Ciudad Condal, que son Opium, Shoko y CDLC. El Ejecutivo local ha presentado hoy una entente con el CSIC para ampliar un centro de estudios del mar en estos locales, a los que ya prometió desalojar en 2019, sin lograrlo

Lo ha explicado la propia Administración local en una nota de prensa, en la que ha precisado que el compromiso entre ambas partes pende de un protocolo de colaboración para "ampliar los espacios" de investigación del Centro Mediterráneo de Investigaciones Marinas y Ambientales (CMIMA).

El ocio, fuera

Ello ocurrirá cuando venza la concesión que tienen los negocios de la noche. En una primera fase, el CSIC ocuparía el local que tiene delante, mientras que posteriormente se expandiría a los dos "contiguos". Esos espacios son los que en la actualidad ocupan Opium, Shoko y Carpe Diem Lounge Club (CDLC). 

El Hotel Arts (i), junto a la Torre Mapfre en el frente marítimo de Barcelona / CG

El objetivo de esa ampliación es la "transferencia de conocimiento y divulgación ciudadana", en particular en relación a "las temáticas relacionadas con el medio marino". 

Barcelona, capital científica

Desde el Ejecutivo local se defiende que la actuación conjunta con el CSIC pende del acuerdo de capitalidad científica de Barcelona, que firmaron el presidente del Gobierno Pedro Sánchez y la alcaldesa Ada Colau en febrero de 2020. 

En paralelo a ello, el bipartito sostiene que la política municipal va aparejada al Plan Barcelona Ciencia 2020-2023, que busca impulsar la investigación e innovación en la Ciudad Condal. 

4.300 metros cuadrados

Por el momento y con este paso, el gobierno municipal sostiene que se ganarán hasta 4.330 metros cuadrados en las dos fases en las que se dividirá el crecimiento. En un primer momento, el CSIC ocupará el local situado delante, que explota Opium y que mide unos 2.565 metros cuadrados. 

Tras ello, se expandiría también a "los dos locales contiguos", que son los que ocupan Shoko y Carpe Diem, con 690 y 1.075 metros, respectivamente. 

En 2019, sin éxito

Cabe recordar que el mismo gobierno municipal ya avanzó en 2019 que echaría a los locales de ocio nocturno del Frente Marítimo. Pero ello fue en balde, pues lo explotadores lograron hacer valer los derechos adquiridos y pujaron por los espacios, logrando una concesión extra de cinco años. 

En paralelo a ello, la inversora del Hotel Arts trató de quedarse con buena parte del resto de la zona en la venta pública celebrada en octubre de 2020. Lo consiguió, aunque algunos operadores como Moncho's o Pachá lograron ejercer el derecho de adquisición preferente y cortaron el paso al rascacielos, que pretendía hacer una marina de lujo.