El Ayuntamiento de Barcelona ha rechazado el 80% de solicitudes para consolidar las terrazas de restaurantes y bares instaladas de forma excepcional durante la pandemia. Según datos del Gremio de Restauración de Barcelona, el gobierno local está archivando "de manera masiva" las peticiones, hasta el punto de que en distritos como Ciutat Vella la tasa de denegación alcanza el 99% sobre un 85% de expedientes resueltos --en toda la ciudad, se han tramitado cuatro de cada 10 licencias presentadas de un total de 2.800--.
La asociación destaca que únicamente el 6% de los veladores denegados se hallan en las denominadas "zonas saturadas". De hecho, el gremio calcula que más del 70% de las peticiones canceladas se deben a una aplicación incorrecta de la ordenanza. "Por ejemplo, creer que la terraza no puede sobrepasar los límites de la fachada del local cuando, en realidad, la normativa es flexible y sí que lo permite de manera expresa", explica la entidad en un comunicado.
Los restauradores, "engañados"
El director del gremio, Roger Pallarols, ha afirmado que "el compromiso del gobierno municipal en relación al mantenimiento de las mesas Covid ha sido nítido e inequívoco". "Para que esto pueda pasar, se ha modificado la ordenanza, se han homologado cuatro modelos de plataforma y se ha animado al sector a solicitar la regularización", ha dicho.
"Denegar sistemáticamente y sin justificación, tal como se está haciendo, significará haber engañado al sector, haberle hecho creer que presentar la petición serviría para conservar la terraza", ha criticado. Respecto al caso de Ciutat Vella, la entidad asegura que reclamará un enfoque técnico "coherente con la flexibilidad que proclama la ordenanza”. Los restauradores y el ayuntamiento pactaron una reforma de la normativa local en diciembre de 2021 para permitir la consolidación de los veladores que se pusieron en la calzada en 2020.
Nuevo manual operativo
No es el único conflicto reabierto con la hostelería. La revisión del manual operativo también contradice el espíritu de la reforma pactado hace seis meses, según los empresarios. "Este intento para forzar una regresión normativa colisiona con el posicionamiento del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña quien, en diversas sentencias recientes, ha declarado que el manual no tiene rango normativo (...). Los manuales operativos deben limitar su contenido a finalidades didácticas y organizativas".
La asociación ha avanzado que impugnará ante la justicia el nuevo manual operativo si el ayuntamiento no rectifica su posición.