ACS ahorrará 40 millones al adquirir el 100% de su filial australiana

A finales del pasado febrero, el grupo de construcción y servicios que preside Florentino Pérez anunció el lanzamiento de una opa sobre Cimic con el objetivo de adquirir el porcentaje del capital que aún no estaba en sus manos, por entonces algo más del 21%.

Simplificación

La maniobra se ha llevado a cabo a través de Hochtief, filial alemana de ACS, que es la que controla directamente la participación en la empresa oceánica. Según explicó en su día el propio Pérez a los analistas, tras la presentación de los resultados anuales, el objetivo de esta operación es simplificar la estructura societaria del grupo y pasar de tener tres compañías cotizadas a sólo dos, toda vez que tanto la matriz como Hochtief, de la que ACS controla algo más del 50%, seguirán en el parquet.

A tal efecto, Hochtief lanzó la opa sobre Cimic a un precio de 22 dólares australianos por título, lo que suponía una inversión de algo más de 980 millones de euros con el tipo de cambio de aquel momento. 

Más del 96%

Sin embargo, los instrumentos de cobertura empleados por Hochtief para cubrirse del riesgo de las fluctuaciones en el mercado de divisas ha generado ahorros en el entorno del 5%, algo más de 40 millones de euros.

Según figura en el informe de los resultados de Hochtief correspondientes al primer trimestre, la compañía ya ha conseguido incrementar su participación en Cimic por encima del 96% y, a partir de ahora, pondrá en marcha un proceso de compra continua de títulos, en las mismas condiciones que las incluidas en la opa, hasta hacerse con la totalidad del capital, objetivo que espera cerrar antes del fin del trimestre.

Baile de sillas

Estas cifras han sido comunicadas por Marcelino Fernández Verdes, quien fuera consejero delegado de ACS hasta hace algo más de un año, y que permanece como presidente del consejo de administración de Hochtief. El ejecutivo asturiano también llegó a estar al frente de la propia Cimic.

Precisamente, esta maniobra ha permitido el aterrizaje en ACS de Juan Santamaría, hasta ahora máximo responsable de la filial australiana y que fue ratificado la pasada semana por la junta de accionistas del grupo como nuevo consejero ejecutivo para poder ser nombrado posteriormente consejero delegado. 

La entrada de la sede de ACS en Madrid / EP

Fuera de la bolsa

Merced a la operación de reestructuración, Cimic pasará a estar bajo del control absoluto de Hochtief, cuyas cuentas están consolidadas en su totalidad por ACS por su condición de socio mayoritario.

Por lo pronto, uno de los objetivos perseguidos por la compañía española en la operación, la exclusión de cotización de Cimic en la Bolsa de Sydney, ya está conseguido. El pasado viernes, los títulos de la empresa fluctuaron por última vez en el parquet oceánico, después de que el regulador local aceptara su exclusión debido al muy escaso capital flotante que le resta.

Intentos fallidos

Esta reestructuración del negocio internacional se combina con los planes de ACS para constituir un gran grupo de concesiones de autopistas, como plan prioritario para reinvertir gran parte de los ingresos obtenidos por la venta de su negocio industrial a la francesa Vinci. 

Hasta en dos ocasiones, ACS ha iniciado operaciones en este sentido. En primer lugar, con una oferta por las concesiones italianas de Atlantia, su socio en Abertis, que la empresa transalpina tuvo que vender por indicación del Gobierno local tras la tragedia del puente Morandi.

Movimiento defensivo

Tras ver frustrado este intento (dado que Roma optó por una entidad financiera pública con el apoyo de grandes fondos internacionales), ACS se alió a GIP y Brookfield en la oferta que éstos trasladaron a la familia Benetton, primer accionista de Atlantia por el conjunto de la compañía. La intención de la empresa española era adquirir el negocio de autopistas una vez que se llevara a cabo la operación. 

Este intento también quedó en nada debido a la reacción de defensiva de los Benetton, que buscaron una alianza con Blackstone para lanzar una opa de exclusión sobre Atlantia.