No hay tiempo que perder en Atlantia. La familia Benetton, primer accionista de la concesionaria italiana, ultima las negociaciones con el fondo Blackstone para lanzar una opa sobre la compañía antes de que finalice la presente semana y frenar así las aspiraciones de ACS, que negocia con GIP y Brookfield una operación para hacerse con la empresa.
De acuerdo con una información publicada poco antes del cierre de la sesión de este lunes por la agencia Bloomberg, las conversaciones entre los Benetton y Blackstone también se están trasladando a otros socios con participaciones significativas en la compañía, con el fin de que acepten la propuesta, toda vez que la intención es obtener el mayor porcentaje posible de títulos y, de esta manera, poder promover la exclusión de bolsa de Atlantia.
Movimiento en bolsa
El movimiento responde a una estrategia para evitar que el consorcio en el que está incluido el grupo que preside Florentino Pérez termine por hacerse con el control del grupo, para lo que lleva tiempo en negociaciones. En esta operación, que también adelantó Bloomberg a mediados de la pasada semana, ACS estaría dispuesta a adquirir la cartera de concesiones de autopistas de Atlantia para confeccionar un gran grupo mundial del sector.
Nada más conocerse la noticia, los títulos de Atlantia, que habían corregido parte de las intensas subidas registradas a finales de la pasada semana, han enjugado la mayor parte de los recortes, aunque aún se dejan en torno al punto porcentual, en un entorno de 22 euros por acción en el que rondaría el precio de la opa defensiva.
Pactar con los socios
Las negociaciones para el lanzamiento de una operación defensiva se han extendido a accionistas con participaciones significativas en Atlantia, como el fondo soberano de Singapur GIC y la Fundación Cassa di Risparmio di Torino, de corte financiero, para asegurarse su respuesta positiva.
En la actualidad, los Benetton controlan aproximadamente un tercio del capital de la compañía que, naturalmente, quedaría bloqueado en este caso; los otros dos socios mencionados ostentan participaciones que suman cerca de un 15% del capital.
La relación Benetton-GIC
Cabe recordar que Benetton y GIC también son socios en la gestora de infraestructuras de telecomunicaciones española Cellnex, en la que el fondo del Sudeste Asiático tomó el relevo de los italianos como primer accionista; en la actualidad, GIC controla algo más de un 9% de la empresa que dirige su consejero delegado, Tobías Martínez, mientras que Edizione (el holding de los Benetton), que llegó a tener más de un 14% del capital, cuenta en la actualidad con el 8,5%.
Por su parte, GIP y Brookfield aguardan los movimientos de los Benetton para tomar una decisión sobre si siguen adelante con sus planes de tomar el control de Atlantia, con la ayuda de ACS, o desisten. Entre las opciones que se barajan, no está descartada una que contemple mantener como accionista a Edizione, en el caso de no aceptar su oferta. Una opción que a los italianos no parece convencerles.
A vueltas con la valoración
A la puerta de los Benetton han tocado otros grandes fondos interesados en hacerse con el control de Atlantia; de ahí que, ante la amenaza de perder el control en alguna de estas maniobras, los empresarios italianos hayan decidido cortar por lo sano y alejar a la concesionaria de los potentes focos del mercado.
Uno de los factores que han generado tan voraz apetito por la compañía ha sido, precisamente, su situación en bolsa, toda vez que el mercado consideraba que cotizaba a un precio demasiado reducido, que estaba infravalorada en función de la calidad de sus activos y su potencial y que, por lo tanto, constituía un fruto más que apetecible.