El salón gastronómico que celebran conjuntamente Alimentaria y Hostelco desde 2018 vuelve a Barcelona tras aplazar sus dos últimas ediciones a causa de la pandemia. La feria, una de las más relevantes de la Ciudad Condal, se celebrará del 4 al 7 de abril con el objetivo de reactivar la hostelería tras la crisis derivada del Covid-19 gracias a un programa de actividades centradas en la innovación, la sostenibilidad y la proximidad.
Así lo han expresado sus organizadores en el acto de presentación que ha tenido lugar esta mañana en el restaurante Pez Vela de la capital catalana. “Esta será la Alimentaria de la recuperación y aportará optimismo para todo el sector, así como para la economía española”, ha destacado José Luis Bonet, presidente de Alimentaria y de la Cámara de Comercio de España.
Cerca de 3.000 empresas expositoras
A poco más de un mes de su celebración, la feria ya cuenta con unas 3.000 empresas confirmadas, que ocuparán cerca de 85.000 metros cuadrados del recinto Gran Via de la Fira de Barcelona. De ellas, alrededor de 400 son de origen extranjero y provienen de 52 países distintos.
La cantidad de expositores es menor que la de otros años —cuando se ha alcanzado los 4.500—, un hecho que se debe no solo a la situación pos-Covid, sino también a la creación de la Barcelona Wine Week. “Intervin era parte de Alimentaria y, al crearse este nuevo evento, hemos perdido la parte de empresas de vino, pero unas 620 de estas estarán en Montjuïc”, ha explicado J. Antonio Valls, director de Alimentaria, a Crónica Global.
Prevén alrededor de 110.000 asistentes
El ejecutivo asegura que la mayoría de los sectores están ya con la ocupación completa, aunque todavía quedan algunos espacios libres, por lo que no descartan que se añada alguna empresa más durante estas semanas previas a la feria.
Tras casi dos años de pandemia en los que la restauración ha resultado uno de los sectores que más han sufrido las consecuencias de la crisis por sus constantes cierres y las duras restricciones, los organizadores del evento creen que ahora es el momento de retomar la presencialidad. “Creemos que los ratios de internacionalidad rondarán el 25% o 30% y esperamos una asistencia global de entre 105.000 y 110.000 personas”, concreta Valls.
Una edición muy “normal”
En este sentido, Bonet subraya que va a haber una gran participación internacional porque la gente “tiene ganas de venir”, por lo que será una edición “muy normal en este sentido”. Y es que, como ha señalado Rafael Olmos, presidente de Hostelco, “no hay pantalla que sustituya un apretón de manos, saborear una tapa o ver cómo funciona un equipo de cocina”.
Por ello, defiende que es el momento oportuno para retomar este certamen, pues lo considera una estrategia para dinamizar el mercado y la industria. “El objetivo es volver cuanto antes a las cifras pre-Covid, y con la pandemia a la baja y los índices de recuperación sabemos que celebraremos una gran edición”, ha concluido Olmos.