La batalla del PP lleva la inquietud al empresariado madrileño

En la batalla, Díaz Ayuso cuenta con el favor de los empresarios, que no dudarán en cerrar filas en torno a la mandataria si llega el caso de que precise de su apoyo.

Estrategia fiscal

No en vano, en las diferentes patronales y lobbies de la Comunidad valoran de forma muy positiva el hecho de que el Gobierno de Díaz Ayuso haya dado continuidad a la política de rebajas fiscales que los sucesivos Ejecutivos del PP en la Administración regional han desarrollado desde mediados de la primera década de este siglo.

Pero, sobre todo, que haya hecho de ello una bandera y seña de identidad y se haya enfrentado a la pretensión del Gobierno central de llevar a cabo una armonización fiscal que suponga un cambio de tendencia en Madrid.

Estabilidad amenaza

Entre el empresariado madrileño tampoco olvidan que Díaz Ayuso abogó siempre en la pandemia por evitar un cierre absoluto de la actividad económica, en una labor conjunta con el Ayuntamiento de la capital, y que las medidas que implantó contribuyeron a salvar numerosas empresas y empleos, especialmente en el ámbito de la hostelería.

El enfrentamiento en el seno del PP, que podría derivar en la expulsión de Díaz Ayuso tras la apertura de un expediente por acusar a la cúpula de espionaje a miembros de su familia, ha provocado inquietud en los empresarios, que ven en esta situación una amenaza para el escenario del que disfrutan en la Comunidad de Madrid y que consideran como privilegiado.

Movimientos entre bambalinas

En este punto, el sentimiento es mutuo, toda vez que la presidenta de la Comunidad de Madrid no perdió nunca una oportunidad en los peores tiempos de la pandemia para mostrar su agradecimiento al compromiso de las empresas con el Gobierno regional a la hora de implementar medidas y de colaborar para labores tan importantes como la compra de material sanitario en el exterior.

Al menos a corto plazo, ninguno de estos colectivos tiene intención de pronunciarse; antes el contrario, mantendrán un profundo silencio que no romperán a no ser que sea estrictamente necesario. Otra cosa es lo que pueda ocurrir entre bambalinas, donde los movimientos no tardarán en sucederse para extender la idea de que los diferentes colectivos están con Díaz Ayuso.

El peligro del mercadeo

Lo que más temen los empresarios es que los acontecimientos pudieran precipitar un relevo en la presidencia del Gobierno autonómico y que fuera la dirección nacional del partido la que impusiera la línea a seguir en la sede de la emblemática Puerta del Sol.

La idea es que en un escenario como ése sería mucho más probable el mercadeo con el Gobierno central y, más concretamente, con el PSOE, uno de los componentes de la coalición, como ya sucedió hace unos meses con los pactos tejidos para acordar la renovación de órganos como el Tribunal Constitucional, el Tribunal de Cuentas o el consejo de administración de Radio Televisión Española.

Por el momento, se impone un compás de espera de acontecimientos aunque las alarmas están encendidas. En diversos entornos empresariales entienden que se trata de una lucha por el poder que a ellos no les concierne, pero que sí les puede afectar en gran medida en función del resultado final.