El pleno del Parlamento Europeo ha dado un portazo a los impulsores de la Superliga europea, un proyecto liderado por el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, y ha aprobado este martes el informe de la política del deporte en la Unión Europea por 597 votos a favor, 36 en contra y 55 abstenciones.
Al malestar de los aficionados y el abandono de la mayoría de equipos, se suman ahora las fuertes críticas de la Unión Europea. Tomasz Frankowski, eurodiputado polaco y vicepresidente del Grupo de Deportes aseguró ayer, durante el debate del informe, que los principios que se pretenden promover desde la institución comunitaria chocan frontalmente con la filosofía de la Superliga.
Contraria a los principios europeos
En este sentido, el eurodiputado aprovechó para recordar que Europa aboga “por un modelo del deporte que reconozca la necesidad de un compromiso sólido con la integración de los principios de solidaridad, sostenibilidad, inclusión, competencia abierta, mérito deportivo y equidad” frente a “las competiciones escindidas que socavan estos principios” y que son, precisamente, los que promueve la Superliga.
Con esta decisión, el Pleno del Parlamento Europeo se suma a la Comisión de la Cultura y Deporte y a la Comisión Europea, que ya habían dado la espalda a esta Superliga en la que solo quedaban ya el Real Madrid, el Fútbol Club Barcelona y la Juventus.
Se oponen a la iniciativa
Frankowski incidió también en la importancia de la salud de los jugadores a la hora de fijar el calendario de partidos con respecto a los torneos internacionales, que deben respetar las ligas nacionales. En la misma línea que el polaco, los eurodiputados austríaco Heide, la alemana Kammerevert y el Comisario Schinas defendieron la filosofía deportiva europea y se opusieron a la Superliga europea. Además, aprovecharon para hacer un llamamiento para que los gobiernos nacionales se opongan a este tipo de iniciativas.